El director xeral de Emerxencias, Santiago Villanueva, afirmó que el Gobierno gallego no descarta la creación de una policía autonómica propia, aunque considera que la actual "no es la época más idónea" para ello, pues opina que "el coste sería inasumible" para la Xunta dado que el presupuesto necesario "crecería de una forma desmesurada" respecto al asignado ahora a la unidad adscrita. De hecho, cifró en "veinte y pico millones de euros" el coste "de personal" con un cuerpo como el que tiene ahora la unidad adscrita.
En respuesta a una pregunta que le fue formulada en la Comisión institucional del Parlamento Gallego, Villanueva manifestó que "la Xunta no renuncia a la creación de una policía propia", aunque en estos momentos se fija otras "prioridades", como "completar los efectivos" de la unidad adscrita.
Asimismo, manifestó que aún existiendo una ley de la policía de Galicia, expresó que la creación de este cuerpo "no supondría la posibilidad de asumir competencias diferentes" a las que ahora ejerce la unidad adscrita, pues sería necesario modificar también leyes estatales sobre el funcionamiento de cuerpos y fuerzas de seguridad del Estado.
En la actualidad, la unidad adscrita está dotada con 371 efectivos de los 500 "previstos". El Gobierno gallego, según el director xeral, solicitó al Ministerio de Interior completar la plantilla aunque esta demanda "no fue atendida", lo que se traduce en "carencias" en el cuerpo adscrito a la comunidad.
El BNG critica la falta de convicción
El diputado nacionalista Alfredo Suárez Canal reprochó al director xeral que el actual Gobierno gallego está "en el paleolítico de la autonomía". Son los mismos argumentos "que el PP en 16 años esgrimió en sede parlamentaria para no crear una policía propia", indicó. Al tiempo, señaló que las otras dos nacionalidades históricas estatales, Cataluña y Euskadi, negociaron esta competencia "y no les acabó costando más dinero y a la larga les resultó más barato".
Así, el nacionalista critica que el Gobierno gallego no considere "prioritaria" la competencia, algo que vincula con el hecho de que "no tienen convicción en el autogobierno". En opinión de Suárez Canal, la actual Xunta "tiene vocación de ser una diputación" y lanza un mensaje tipo "no descartamos eso pero no vamos a hacer nada para conseguirlo".
Además, opina que el PP ejerce un "galleguismo de manguera", que consiste en sacar la "manguera cuando empiezan a producirse resultados" negativos para la comunidad. Como ejemplo, puso el caso del decreto del carbón y la financiación autonómica.
