La Xunta ha abierto diligencias informativas tras las quejas del Ayuntamiento coruñés de Sada para que los herederos de Francisco Franco, propietarios del Pazo de Meirás, faciliten la visita pública a este bien declarado de interés cultural como se establece por ley. Fuentes de la Consellería de Cultura de la Xunta han explicado a Efe que, tras la apertura de estas diligencias, habrá que escuchar las consideraciones de todas las partes.
Este proceso se ajusta a la vigente Ley de Patrimonio Cultural de Galicia, añaden las mismas fuentes, por lo que se ha comunicado a la familia Franco lo establecido en el artículo 26 de esta normativa que regula el "Acceso al patrimonio cultural de Galicia". El precepto 3 indica que "los propietarios, poseedores y demás titulares de bienes declarados de interés cultural deberán facilitar la visita pública a estos en las condiciones que se determinen, que en todo caso será gratuita durante cuatro días al mes, en días y horario prefijado".
El pazo de Meirás está ubicado en el municipio coruñés de Sada y anteriormente había sido propiedad de la escritora Emilia Pardo Bazán, hasta que el pueblo gallego lo entregó a Franco tras la Guerra Civil y fue su residencia de verano durante décadas. El Tribunal Supremo confirmó el carácter público y cultural del pazo y obligó a los propietarios a abrir sus puertas cuatro días al mes.
En 2008 fue declarado bien de interés cultural y, en estos últimos años, se han sucedido las denuncias acerca de las dificultades para realizar visitas a este edificio. El pasado verano, fuentes de la Xunta aseguraron a Efe que se estaba cumpliendo con la obligación de abrir el pazo al público los cuatro días de agosto estipulados pero a finales de mes porque antes sus propietarios lo utilizan para su uso privado.
