La alcaldesa del ayuntamiento ourensano de Melón, María Cristina Francisco, acusada por un presunto delito de falsedad documental, negó este jueves los hechos y manifestó su convencimiento "de que el trabajo se había realizado".
La regidora declaró en el juicio celebrado en la Audiencia Provincial de Ourense que "no era competencia del Ayuntamiento" comprobar si el penado realizaba o no los trabajos, sino que se limitaba al "control de presencia".
Por estos hechos, se enfrenta a una condena de un mínimo de cuatro años y medio de cárcel por amparar presuntamente el incumplimiento de trabajos sociales realizados por un penado del municipio ourensano.
Según recoge la Fiscalía, el hombre estaba obligado a realizar once jornadas de desbroces para saldar un delito contra la seguridad del tráfico. A este respecto, la regidora popular, que certificó y firmó el cumplimiento de las jornadas de trabajo social del coacusado, aseguró que se fió de las palabras de un vecino ya que ella no iba al consistorio los sábados.
Por su parte, una administrativa, responsable de tramitar los expedientes con los penados, explicó que había mecanismos de control con los penados.
La regidora de Melón se enfrenta a 4 años y medio por presunta falsificación
María Cristina Francisco negó los hechos en la Audiencia Provincial de Ourense
