La marea roja paraliza las bateas de las rías gallegas

El cierre de polígonos de bateas en Galicia por la presencia de biotoxinas podría prolongarse durante varias semanas y afectar a más zonas, según las previsiones del Instituto Tecnológico del Mar (Intecmar).

La directora del Intecmar, Covadonga Salgado, ha explicado a los medios que con estos episodios de toxina lipofílica, de los que suele haber "dos o tres al año" en Galicia, se acostumbra a hablar de escalas temporales "de semanas o meses", y en estos momentos desconocen si el actual está "en su cima".

"Las noticias que tenemos es que se está incrementando y que puede demorarse durante semanas", ha apostillado Salgado, quien ha destacado la manifestación "muy virulenta y repentina" de este episodio de biotoxinas y su afección a moluscos como la almeja o la navaja, menos vulnerables que el mejillón.

Una circunstancia que ha achacado a la presencia en el agua de dos especies fitoplanctónicas (PSP y ASP) de forma simultánea.

En todo caso, ha subrayado que la situación está "controlada", pero ha animado al consumo de moluscos bivalvos por los cauces legales, y que no se adquieran los de origen dudoso o de la actividad furtiva.

La directora del Intecmar ha reseñado que el mercado "no tiene por qué estar desabastecido" porque hay polígonos de mejillón abiertos y zonas de molusco infaunal activas, "aunque es cierto que hay muchas rías afectadas", ha admitido.

La llamada "marea roja" afecta de momento a toda la ría de Muros y Noia y la de Pontevedra, y a las zonas 1,2 y 3 de la de Arousa, y la 1, 2 y 4 de Vigo.

Sobre las quejas de los mariscadores de la ría de Muros y Noia en cuanto a que se dieron los avisos este miércoles cuando ya se había capturado el género, ha indicado que se informó de los cierres a través de correos electrónicos tan pronto tuvo el Intecmar los resultados de las analíticas realizadas.

Ha reconocido que los cierres provocan "cierta distorsión" en la cadena de comercialización, pero que "el objetivo principal" del Intecmar es "garantizar al máximo" la salud del consumidor y evitar que lleguen al mercado productos con toxina.

"El sector tiene que saber que cuando hay un cierre, todo el producto en la cadena se tiene que paralizar y analizar", ha remachado la directora del Intecmar, para quien "más agilidad no se puede pedir".

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