La Guardia Civil apunta a la estafa como móvil del presunto secuestro de Pontedeume en 2004

Entre el lunes y el martes se celebra el parte del proceso contra siete varones, para los que el fiscal pide entre nueve y diez años por un supuesto caso de rapto, y para el que la víctima no se ha presentado

La Guardia Civil ha apuntado este martes a una estafa como el motivo del presunto secuestro de una persona de nacionalidad camerunesa en el municipio coruñés de Pontedeume en 2004, cuyo juicio ha quedado pospuesto para el próximo 19 de octubre.

La sección primera de la Audiencia provincial de A Coruña ha acogido entre las jornadas del lunes y del martes del proceso contra siete varones para los que el fiscal pide entre nueve y diez años de prisión acusados del presunto secuestro perpetrado hace once años.

Los procesados habrían retenido a un camerunés en el barrio coruñés de Matogrande desde donde lo habrían llevado a Centroña (Pontedeume) para producirle varias lesiones y posteriormente trasladarlo en el maletero de un coche, hasta que sufrieron un accidente en la autovía A-6, en su paso por el municipio de Baralla.

El juicio se suspendió el pasado mes de marzo porque la víctima no fue localizada y, desde entonces, las autoridades han intentando hallarla sin lograrlo, por lo que el juicio se ha celebrado en su ausencia y de la de un agente de la Guardia Civil clave, lo que ha obligado a un nuevo aplazamiento.

La última sesión ha quedado fijada para el próximo 19 de octubre, cuando declarará este agente y tanto el fiscal como los abogados defensores harán su alegato final.

Uno de los agentes que ha declarado este martes ha apuntado a una supuesta estafa del hombre de nacionalidad camerunesa junto con otras personas como el móvil del secuestro, pues los ahora procesados habrían querido reclamar el dinero.

El fiscal en su escrito ya había evocado la posibilidad de un timo con billetes de cincuenta euros tintados, una teoría que cobra fuerza, aunque uno de nacionalidad búlgara permanece en paradero desconocido.

Otro agente de la Guardia Civil ha afirmado que el supuesto secuestrado "creía que lo iban a matar", pues "estaba totalmente asustado, tenía pánico", algo que repitió más tarde durante la fase de instrucción.

Los peritos han detallado que en el coche accidentado, en cuyo maletero fue descubierta la supuesta víctima, los agentes hallaron cuerdas, bridas y manchas de sangre.

Comentarios