Toda la información intervenida en casa del lucense detenido en el marco de una operación internacional contra la distribución de pornografía infantil a través de WhatsApp abre el camino para una nueva investigación sobre las actividades de este individuo, dado que, supuestamente, llevaba un listado manuscrito en el que anotaba nombres, edades e incluso correos electrónicos de jóvenes con los que había mantenido encuentros y los lugares en los que se habían producido.
Algunas de esas anotaciones, han informado fuentes del caso, se remontan a más de veinte años atrás, según confirmó la propia Unidad de Investigación Tecnológica de la Policía Nacional.
Fuentes próximas a la investigación confirmaron a Efe que el detenido es un hombre de cuarenta años de edad y vecino de A Pastoriza, que fue arrestado y puesto a disposición del Juzgado de Mondoñedo hace menos de un mes.
Después de prestar declaración, quedó en libertad "con cargos y con medidas cautelares -comparecer cada quince días en sede judicial-, precisaron los mismos informadores, como investigado por tenencia y distribución de pornografía infantil.
La investigación se centrará ahora en las posibles víctimas y en el análisis del material incautado en su casa de A Pastoriza, fundamentalmente su teléfono móvil y algunos archivos informáticos, porque el detenido no tenía grandes conocimientos sobre tecnología y, aparentemente, sólo distribuía los contenidos pedófilos a través de grupos de WhatsApp y sin tomar precauciones para evitar ser descubierto.
Los responsables de las pesquisas tratan de determinar ahora si, además de distribuir pornografía infantil, el detenido en A Pastoriza participó en la grabación de algunos vídeos, así como si mantuvo en los últimos meses encuentros sexuales con menores.