Xulio Ferreiro alerta de "presiones para que nada cambie" tras el 20-D

El alcalde de A Coruña destaca el "deseo popular de cambio" que se ha reflejado en las elecciones del pasado domingo
El alcalde de A Coruña, Xulio Ferreiro
photo_camera El alcalde de A Coruña, Xulio Ferreiro

El alcalde de A Coruña, Xulio Ferreiro, ha destacado este miércoles el "deseo popular de cambio" que se ha reflejado en las elecciones generales del pasado 20 de diciembre, tras las que se están produciendo "presiones muy fuertes para que nada cambie".

El regidor coruñés se ha mostrado este miércoles "satisfecho" con el respaldo a su formación en los comicios, pues contó con "9.000 personas más que confiaron en el espacio político" de la confluencia, que el domingo fue En Marea y que en las municipales había sido la Marea Atlántica. "No me atrevo a hacer un pronóstico para el Gobierno. Creo que se expresó una voluntad de clara de cambio. Estamos viendo movimientos y presiones muy fuertes para que nada cambie. Veremos si gana ese deseo popular de cambio o las presiones por arriba de que nada cambie", ha apuntado a los periodistas tras un desayuno informativo.

En el Congreso, En Marea tendrá seis diputados y "la vocación es formar un grupo parlamentario propio", que es "lo que va a pasar" porque "lo contrario sería retorcer demasiado la normativa parlamentaria".

La interpretación contraria vincula a varios diputados de En Marea con Podemos e Izquierda Unida, la formación a la que pertenecen, lo que les impediría estar en un grupo distinto. "La coalición de En Marea tiene su personalidad jurídica. La interpretación que se hace del reglamento no me parece la mejor, pero ya tuvimos casos similares. Lo que en su día valió para el PNV no sirvió con el mismo texto para Amaiur", ha apuntado Ferreiro, profesor de Derecho y juez hasta su investidura como alcalde.

Tras seis meses de mandato, "los más complicados porque hay que tomar las riendas de la institución", asegura estar contento porque ha puesto "a andar las primeras veinticinco medidas del programa" y porque tiene un importante respaldo ciudadano, por lo que está "ilusionado para seguir trabajando en 2016".

El próximo año, "un sábado al mes el Gobierno irá a un centro cívico, se convocará a la gente y cualquiera podrá ir allí a decir lo que quiera, hacer preguntas o exponer sus quejas", con actos celebrados con "varios concejales" y con el propio Ferreiro "al menos cada dos meses". Comenzará el curso con los "presupuestos prorrogados", algo que considera "normal en el primer mandato" al no tener mayoría absoluta, que obliga a negociar con el PSOE, un proceso que "va bien" y por eso el regidor espera "que para principios de enero haya fumata blanca".

Ha anunciado el alcalde que terminará 2015 en el ámbito presupuestario "al 99,9 por ciento en positivo y, por lo tanto, se acabará el año con normalidad". Durante el mes de enero se abordará el cumplimiento completo de la Ley de Memoria Histórica, cuyos cambios han pasado por la odificación del nombre de la avenida de los Caídos o la llegada de la calle Antón Vilar Ponte con motivo del aniversario de las Irmandades da Fala.

Respecto a las obras de la Marina ha recordado que "hay un par de deficiencias que son importantes" y el Ayuntamiento quiere "recepcionar la obra en perfecto estado de revista", entre otras razones por motivos de seguridad. Otro de los asuntos de actualidad en la ciudad es el relacionado con el Parque Ofimático, que "tenía un problema de inicio, que es el margen derecho del núcleo de Elviña" y trabaja para corregirlo, aunque reconoce que "al mismo tiempo hay un desarrollo urbanístico que hay que potenciar" y que ya está en proceso.

Consultado por la construcción de la estación intermodal, ha recordado que "el compromiso de Fomento y de la Xunta" es empezar a construirla y por eso el Ayuntamiento hace sus "deberes", si bien ha considerado que el presupuesto autonómico de este año es insuficiente para esta actuación.

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