El presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, se comprometió en Lugo a que los próximos presupuestos de Galicia asegurarán las prestaciones, "pese a los accidentes económicos del Gobierno socialista en Madrid".
En un acto donde estuvieron, entre otros, el conselleiro de Medio Ambiente, Territorio e Infraestructuras, Agustín Hernández, y del Mar, Rosa Quintana, el presidente gallego se marcó ambiciosos objetivos ante las próximas elecciones locales, donde dijo que el PP gallegos aspira a ganar y gobernar "en todos" los Ayuntamientos y las cuatro diputaciones gallegas.
Los presupuestos de la Xunta para 2011 contemplarán "impuestos cero" para aquellos propietarios de montes arbolados que apuesten por la concentración de parcelas a fin de mantener la riqueza forestal.
Éste fue el compromiso con el que este mediodía cerró su discurso el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, en una comida que mantuvo en Lugo con unos 3.000 simpatizantes y cargos públicos del partido.
Era la novedad que el titular del ejecutivo gallego reservaba para despedir su intervención en la provincia de mayor superficie arbolada de España.
"En los presupuestos de 2011 -dijo- llevaremos otra bajada de impuestos para que todos los propietarios forestales que quieran agrupar sus bosques, con el fin de obtener más riqueza forestal, no paguen ningún impuesto".
Con anterioridad ya había realizado constantes alusiones a las partidas presupuestarias de 2011, de las que dijo que constituirán una garantía de "estabilidad, solvencia y bienestar".
"Me comprometo -agregó- a que los presupuestos de la Xunta sean un seguro a todo riesgo para las prestaciones, pese a los accidentes económicos del Gobierno socialista en Madrid".
En la misma clave presupuestaria, acusó al Gobierno Central de hacer uso de "una permanente improvisación" y haber antepuesto el interés general "a favor" de 6 diputados del PNV, que, dijo, "tienen la llave de la gobernabilidad de toda España".
Fue en este momento y bajo este argumento cuando aprovechó para arremeter contra el presidente del Gobierno, al concluir que "cuando uno está débil, entrega hasta la dignidad, que es lo que hizo el señor Rodríguez Zapatero, entregando la dignidad de los intereses generales de todos los españoles, con el pacto vergonzante con 6 diputados del Partido Nacionalista Vasco".
Hizo hincapié en que en 2011 Galicia continuará con la senda de la "austeridad", para seguir siendo "un referente" en la solvencia, que -matizó- "no es otra cosa que pagar lo que debemos, atender a los contratistas que tienen obras con la Xunta, los proveedores y pagar las nóminas, a las farmacias y todo aquello que gastamos".
Garantizó que los presupuestos de la Xunta contribuirán a mantener el Estado de bienestar "que el Gobierno socialista de Madrid está recortando".
Frente a las partidas que el Gobierno gallego diseña para 2011, situó los Presupuestos Generales del Estado (PGE) como la "antítesis del rigor" y por eso dijo que "ahora tenemos que devolver lo que gastó de forma irresponsable el Gobierno anterior de la Xunta, que son, nada más y nada menos, que 2.600 millones de euros, a razón de 500 millones de euros cada año, hasta 2016".
También cuestionó los PGE como la "antítesis de la planificación", para luego preguntarse: "¿Cuáles son realmente los presupuestos del Estado?". "Los presupuestos del Estado -se respondió- son las monedas necesarias para que el señor Rodríguez Zapatero se mantenga un año más con respiración asistida en el palacio de la Moncloa".
Avanzó que las partidas estatales de 2011 solo servirán para traer "más crisis, más paro, más impuestos y más déficit público, que justamente será lo que no podemos hacer en la Xunta de Galicia".
