Erimsa afirma que la actividad de las minas no afectará a las granjas

La empresa Erimsa, concesionaria de varias explotaciones mineras en la comarca de Terra Chá, asegura que su actividad en esta zona de la provincia de Lugo "no afectará, en ningún caso, a las explotaciones ganaderas y agropecuarias" y se compromete a ser respetuosa con el medio ambiente.

En un comunicado, la compañía explica que recuperará "para su uso anterior en un plazo máximo de dos meses" los terrenos afectados por la actividad minera para la extracción de cuarzo y se compromete a restaurar "por completo la capa vegetal de la tierra después de realizar la extracción mineral de forma selectiva".

De hecho, Erimsa afirma que utilizará "un método de cribado con una profundidad de excavación de un metro o metro y medio como norma general" y respetará "los ciclos productivos de la tierra para que los agricultores puedan programar los cultivos y las cosechas".

Así, "la superficie máxima de explotación en cada concesión, de forma simultánea, será de dos hectáreas sin cantera o hueco permanente desde la primavera al otoño, en condiciones meteorológicas favorables", precisa la compañía.

También se compromete a presentar un "plan de actuación anual", así como un "informe de seguimiento medioambiental sobre cada una de las áreas de extracción de cuarzo al inicio de su labor", para informar a los propietarios de las parcelas afectadas.

Según la empresa, su actividad en la Terra Chá permitirá la "dinamización económica" de la comarca, "como alternativa a otros sectores", dado que "el inicio de la labor extractiva en la zona supondrá la creación de empleo directo y numerosos puestos de trabajo indirectos en empresas auxiliares, así como la dotación de infraestructuras básicas".

Por otra parte, aclara que "la compañía pactará de forma individualizada las condiciones económicas de alquiler de los terrenos con los propietarios, a los que facilitará información detallada sobre el proceso y el seguimiento de los trabajos".

Por último, Erimsa aclara que sus trabajos en esta comarca tampoco afectarán a "infraestructuras públicas, zonas de reconocido valor ambiental, ríos, complejos deportivos, infraestructuras o bienes del patrimonio cultural".

La concesión de los permisos de explotación de varias minas de cuarzo en la comarca lucense de a Terra Chá ha sido objeto de polémica entre la empresa Erimsa y los ganaderos de la zona, que se oponen, apoyados por los sindicatos agrarios y otros colectivos sociales, a la implantación de estas canteras.

De hecho, hace unos días, la Comisión contra las Minas da Terra Chá presentó más de quinientas alegaciones contra la licencia de actividad para las concesiones de Cospeito y hoy registrará cerca de doscientas para que el Ayuntamiento de A Pastoriza tampoco le de los permisos que necesita para trabajar en ese municipio.

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