La titular del juzgado de lo penal número 3 de Vigo ha condenado a dos años de prisión e inhabilitación especial para el ejercicio de la profesión médica por un periodo de 4 años a Pedro Larrauri, el traumatólogo que atendió a la gimnasta Desirée Vila, a la que le fue amputada una pierna tras sufrir una caída en 2015.
La jueza lo considera responsable de un delito de lesiones por imprudencia grave con pérdida de miembro principal y grave deformidad. Lo condena asimismo a indemnizar a la perjudicada en más de dos millones de euros. La joven gimnasta viguesa tenía entonces 16 años y ahora usa prótesis.
La sentencia no es firme y se puede recurrir ante la Audiencia Provincial de Pontevedra.