Las donaciones de órganos superan la media pero sin llegar al nivel precovid

Lugo y Ourense sí rebasaron los datos de 2019. En Galicia se realizaron el año pasado casi 300 trasplantes
A muller permanece ingresada en estado grave no CHUAC. CABALAR (EFE)
photo_camera El Complexo Hospitalario Universitario de A Coruña. CABALAR (EFE)

Galicia registró el año pasado 112 donaciones de órganos y realizó 298 trasplantes en los hospitales de A Coruña y Santiago. Así, se mantiene en niveles similares a los de 2020 —cuando los donantes fueron 110— y, de nuevo, supera la meta de 40 donantes por millón de habitantes señalada por la Organización Nacional de Trasplantes: fueron 41,6, un punto más que la media española. 

"Son datos muy destacables si se tiene en cuenta la situación", reivindicaron el director xeral de Asistencia Sanitaria, Jorge Aboal; su homóloga de la Axencia Galega de Doazón de Órganos e Sangue (Ados), Marisa López, y la coordinadora autonómica de trasplantes, Encarnación Bouzas, en la presentación de un balance cuyos números, según explicaron, se ven condicionados por la pandemia, cuyo impacto afecta a los sistemas sanitarios y, en especial, a las unidades de cuidados intensivos, lo que se deriva en el descenso de una actividad muy dependiente de la disponibilidad de recursos para pacientes críticos. De hecho, en 2019, el último curso antes de la crisis sanitaria, se había alcanzado el récord histórico de donantes, con 136, lo que elevaba la ratio a 50,6 personas por millón. 

Sin embargo, trasladando la comparativa al ámbito provincial, destaca que el número de donadores de órganos cadáver en Lugo fue mayor en 2021, con once, que en 2019, cuando hubo una decena. En 2020 habían caído a siete. Y el salto en Ourense es todavía mayor: pasó de dos donantes en 2019 a once el año pasado.

Muestran una dinámica contraria a la de la Galicia Atlántica, aunque, en cualquier caso, vinculado a su peso demográfico, es A Coruña la que sigue liderando las donaciones con 69 —dos menos que en 2020 y catorce menos que en 2019—, seguida por la de Pontevedra, con 21 —cuatro menos que en 2020 y una veintena por debajo de 2019—. 

Los números se ven condicionados por la pandemia

Otro factor que explica estas oscilaciones está en el índice de negativas familiares, que el año pasado fue del 16%, un punto menos que el promedio estatal y casi cuatro frente al porcentaje autonómico de 2020, cuando sufrió un brusco ascenso tras el 13,4% de 2019. Además, 119.687 gallegos cuentan con tarjeta de donante, de las que 1.681 son de nueva creación. 

En cuanto al perfil del donante, son personas con una media de edad de unos 60 años y casi tres de cada cuatro fallecieron a causa de accidentes cerebrovasculares. Tan solo el 2% provino de accidentes de tráfico, si bien es la misma tasa que había antes de la pandemia. 

TRASPLANTES. La cifra de trasplantes —una actividad solo autorizada para A Coruña y Santiago— sigue a la baja, al ser una treintena menos que en 2020 y 56 menos que en 2019. Pero no todo se debe a cuestiones negativas como el covid, sino que también hay que tener en cuenta la efectividad de los tratamientos contra la hepatitis C y que los órganos donados aquí pueden ir a parar a otras autonomías cumpliendo con el protocolo de prioridad, aclaró Bouzas. 

Destaca que, con 48, el número de trasplantes de pulmón fue el segundo más alto desde el comienzo del programa en 1999. La tasa, de 17,8, supera en diez puntos la media nacional. En 2020 fueron 53. 

Con todo, caen en todos los órganos: 140 de riñón —uno menos—; 85 de hígado —hasta 18 menos—; 24 de corazón —cinco menos— y uno de páncreas —uno menos—.

Hay 245 personas pendientes de recibir uno 
Otro dato que se consolida es la tendencia descendente en las listas de espera, con 245 pacientes frente a los 271 de 2020, los 298 de 2019 y los 455 del primer año de la serie. De ellos, seis necesitan un corazón, ocho un pulmón, 21 un hígado, cuatro un páncreas y 206 un riñón.

La coordinadora autonómica de trasplantes precisó que, de media, la espera por un riñón está en un año, dado que además tienen más tiempo gracias a los tratamientos de diálisis. Para pulmón y corazón, es de alrededor de tres meses, añadió. 

Médula ósea 
En cuanto a la médula ósea, Galicia registró 786 nuevos donantes el año pasado, hasta totalizar 13.237. Una generosidad que ha permitido 9.000 trasplantes efectivos en la comunidad.

Comentarios