Dedicar un sábado a la limpieza de los fondos marinos que abrazan el islote Guidoiro Areoso, en la Illa de Arousa, para después clasificar, pesar y gestionar los residuos no es un plan al uso, pero sí una tarea necesaria para el medio ambiente.
Así lo considera al menos la entidad bancaria Abanca, cuyos presidente y CEO, Juan Carlos Escotet y Francisco Botas, respectivamente, dejaron este sábado las corbatas y los trajes de chaqueta en el armario para enfundarse el traje de faena y embarcarse en una flota de doce embarcaciones que en tres horas de trabajo extrajeron 1.060 kilos de residuos de los fondos.
Redes de pesca con cuerdas rellenas de plomo, cubos de plástico, docenas de nasas, boyas, aparejos de pesca y un puñado de nécoras, centollas y vieiras atrapadas entre los residuos salieron a la superficie durante las aproximadamente tres horas que duró esta actividad impulsada por Abanca, a la que bautizó como PLAN-CT-ON, Plan de Conservación Territorial-ON, que enmarca en su Programa de Sostenibilidad. "No esperábamos tanto", reconocieron los ejecutivos de la entidad bancaria.
Junto a ellos se mojaron las manos 53 voluntarios de la Guardia Rural, de la Cofradía de Pescadores y del Club Subacuático Pérez Sub, 14 de ellos buzos y navajeros, que se sumergieron con una cámara subacuática en busca de todo aquello que no pertenece a los fondos marinos, y que finalmente ha sido bastante más de lo esperado.
La actividad de limpieza de los fondos marinos de este sábado es la segunda que organiza Abanca. En la primera se extrajeron 1.700 kilos de residuos. Además, hasta el momento ha organizado otras actividades de limpieza en arenales, actividad que continuará en los próximos meses.