Las centrales de tratamiento de aguas residuales (Edar) son la principal fuente de microplásticos en las zonas costeras debido al lavado de prendas con un alto contenido en fibras plásticas, como PET o nailon, según un estudio realizado por investigadores de las universidades de Vigo y Aveiro y del Centro Oceanográfico de Vigo.
Según explica la revista de la UVigo es una de las conclusiones a las que ha llegado este estudio sobre el transporte y acumulación de microplásticos, el cual, a través de un modelo de simulación de partículas, comprobó también que su distribución depende en gran medida del estado de la marea en el momento en que salen de las depuradoras.
El estudio es obra de Maite de Castro, Marisela Des, José Luis Gómez Gesteira y Moncho Gómez Gesteira, del grupo Ephyslab (CIM-Universidade de Vigo); Magda Sousa, Américo Ribeiro y Joao Dias, de la Universidade de Aveiro (Portugal); y Jesús Gago, del Centro Oceanográfico de Vigo, y ya ha sido publicado por la revista Marine Pollution Bulletin.
Los autores de la investigación simularon con partículas virtuales las trayectorias de los microplásticos a través de las siete depuradoras existentes en la ría de Vigo.
Para ello desarrollaron un modelo que fue calibrado previamente con datos de campo relativos a la concentración de microplásticos en mejillones de roca en diferentes zonas de la ría, lo que, aseguran, otorga al trabajo un considerable grado de confianza en los resultados obtenidos.
Y estos resultados señalan que en el caso de la ría de Vigo la mayor concentración de microplástiocos modelizada se observó en la costa sur, en las proximidades de la ciudad de Vigo, concretamente cerca de la playa de Samil.
En lo que respecta a las mareas, el trabajo señala que cuando son vivas alrededor de un 20 por ciento de los microplásticos emitidos en el interior de la ría llegan a océano abierto, en torno a un 24 por ciento se quedan en las proximidades de las Islas Cíes y el resto se reparte por el conjunto de la ría.
En caso de mareas muertas, la cantidad de microplásticos que llega al océano, aseguran, es "insignificante".
Señalan también los investigadores haber detectado que "el estado de la marea en el instante de emisión de microplásticos es fundamental para conocer su posterior transporte y determinar las zonas de acumulación", y que el conocimiento de la relación entre el estado de las mareas y la dispersión de microplásticos puede llevar a mejorar las estrategias de emisión con el fin de minimizar su impacto en el interior de la ría.
Por último, no ocultan su convicción de que "deben mejorarse los sistemas de tratamiento de aguas residuales para evitar la emisión al medio ambiente de microplásticos".
