La titular del Juzgado de Instrucción Número 1 de Lugo, Pilar de Lara se quejó hoy de la falta de medios "personales" y "materiales" con la que tienen que lidiar jueces y policías para hacer frente a un problema tan grave como la trata de personas.
La jueza De Lara hizo estas declaraciones a los medios de comunicación antes de participar, con la ponencia "Procedimientos penales de investigación en la trata de personas", en las 'III Jornadas contra la trata', que se están desarrollando en la Facultad de Humanidades de Lugo.
"La Justicia cuenta con un marco normativo adecuado, cuenta con especialistas, pero los políticos no nos dan ni los medios materiales, ni los medios personales para luchar con eficacia contra este fenómeno", explicó la jueza.
"Yo, como juez, no puedo estar celebrando juicios de faltas y, al mismo tiempo, dedicarme a otros temas de más complejidad", precisó, como "el blanqueo de capitales, la corrupción y, por supuesto, la trata" de personas.
De Lara afirmó que, desde su punto de vista, éste es un terreno en el que "se le da demasiada importancia a las estadísticas" y "hay determinadas infracciones que, por su gravedad, no pueden quedar sometidas a las estadísticas", matizó.
A su juicio, "de nada sirve" que "sobre el papel" haya una serie de "instrumentos penales" para perseguir los delitos "si luego resulta que no nos dan el dinero para poder hacer efectivas esas medidas".
Se refería, en concreto, a "medidas de protección" o a "los derechos que tienen las víctimas" para recibir asistencia "legal gratuita" o recibir "asistencia médica y psicológica".
"Creo que todavía en ese terreno queda muy bonito sobre el papel, como digo, pero hay que implicarse muchísimo más por parte de las Administraciones Públicas", lamentó.
Aparte de la falta de medios, reconoció que existen otros problemas para perseguir este tipo de delitos, porque en el ámbito de la "cooperación internacional" con algunos países "es prácticamente ciencia-ficción".
Además, "está el problema de concienciación a la sociedad", porque como "dice el informe del Defensor del Pueblo, las víctimas de trata son todavía víctimas invisibles", ya que "hay determinadas conductas que, por la sociedad, se ven como absolutamente normales".
"La trata no sólo es un delito muy grave, es un negocio muy lucrativo, pero sobre todo es una violación de los derechos fundamentales y ese es el enfoque que tenemos que darle. Hasta que no seamos capaces de comprender que es la mayor de las violaciones de los derechos fundamentales, de la dignidad, que despoja a una persona de todo lo más íntimo que tiene, difícilmente podremos luchar contra este fenómeno", insistió.
"Nosotros podemos perseguir a los delincuentes, podemos castigarles, podemos condenarles, y eso es un logro, pero hay que atajar el problema de raíz, y el problema de raíz sólo se ataja creando una política de prevención adecuada", concluyó.
De Lara lamenta la falta de medios, jueces y policías para hacer frente a la trata de personas
