"Hay criminales asentados aquí de una violencia extrema"

Fernando Alonso. GONZALO GARCÍA

Fernando Alonso, gerente de la Fundación Galega Contra o Narcotráfico, opina sobre la operación Mito

Con la objetividad que da el paso de tres meses, ¿cómo valora la operación Mito?
Es especialmente relevante atendiendo al poder de la organización y a la peligrosidad de muchos de ellos, como el hijastro de Oubiña. Bajo el paraguas del nombre de Sito Miñanco hay otros criminales muy importantes. Además, es un caso muy didáctico que nos ayuda a señalar varios aspectos. Primero, porque ilustra el arrepentimiento cero del que hacen gala los grandes capos de la droga. Una y otra vez son detenidos traficando con drogas y aprovechándose de beneficios penitenciarios o reducciones de condena. No sé qué más hace falta para revisar esas concesiones. Tenemos un agujero importante en materia de seguridad. Los beneficios penitenciarios se utilizan para traer cargamentos de cocaína.

Parece imprescindible atacar con fuerza sus bienes.
Esa es otra lectura importante. Después de todo lo que se le habrá incautado a estas organizaciones, todavía aparecen patrimonios multimillonarios. La realidad supera la ficción y nos hace ver que tenemos mucho que avanzar en el tema patrimonial. Cuesta mucho procesar a un traficante y mucho más requisarle y hacerle perder una propiedad. Es una labor enorme que cuesta mucho tiempo y recursos a la Administración de Justicia. En la medida en la que seamos más eficaces en esto, más eficaces seremos en la lucha antidroga.

¿Qué se puede hacer para mejorar en ese sentido?
Con la ley que tenemos en la mano no se puede hacer más, pero eso deberíamos cambiarlo. Si se ve que el traficante pierde el patrimonio y si al salir de la cárcel tiene que volver a trabajar, las cosas serían distintas, pero esto nunca sucede. El que sale de la cárcel tiene opíparos patrimonios a nombre de terceras, cuartas y quintas personas para seguir disfrutando de sus fortunas. Las Fuerzas de Seguridad necesitan más medios, y es una inversión, ni siquiera un gasto. Cualquier unidad policial que se dedique a levantar los enormes patrimonios de estos criminales sería tremendamente rentable para el Estado. Habría que dedicar más recursos, porque aumenta la seguridad pero es una inversión económica. Gastarse medio millón de euros en una unidad de este tipo hará que se obtenga, vía embargos e incautaciones, veinte veces más.

Venían tiempo avisando de que la situación podría ser esta, con Galicia inundada de droga.
Nos advirtieron de esto hace tiempo. Uno no quisiera llevar la razón en algunas cosas. Se dijo que venían tiempos complicados, y así es. Lo dicen la CIA, la DEA, no solo la Fundación. Estamos en una época muy comprometida porque hay una sobreproducción de cocaína que está llegando a los mercados, que son Estados Unidos y Europa. Desgraciadamente España, ya no solo Galicia, es la principal puerta de entrada junto a los Países Bajos. Las organizaciones van cambiando de lugar y de métodos, pero lo cierto es que estamos inundados de drogas. De cocaína, pero también de heroína, porque también hay una sobreproducción, y del omnipresente hachís, que está en todos los sitios.

¿Cómo nos afecta aquí la espiral violenta de Andalucía?
En el Sur tienen un problema gravísimo por la entrada de hachís y los puertos calientes para el envío de contenedores. En Galicia, la FGCN tiene que decir que no se debe mirar solamente a Andalucía, que se recuerde que aquí seguimos teniendo el problema. Pedimos medios, más lanchas patrullando nuestras rías, porque ha habido asignación de recursos para el Sur, pero se trata de potenciar la vigilancia en Galicia, no se trata de desvestir Galicia para vestir otro santo. Antes había dos lanchas de SVA, ahora solo una. Ya no hay avión y el helicóptero se comparte. Todo esto compromete la seguridad de las rías. El tráfico por esta vía es en Galicia el método estrella, a través de barcos y planeadoras. Debemos tener los medios, no solo para cuando vengan, sino para disuadir. Porque si hacemos lo contrario seguirán entrando por aquí.

Tenemos, además, numerosos narcos extranjeros asentados...
De países de Europa del Este, de Sudamérica, asentados aquí y que han venido para quedarse, lo que acarrea problemas de seguridad. Son personas de una violencia extrema, vienen de países donde la vida no vale nada y te pegan un tiro por unas zapatillas deportivas o un teléfono móvil. ¿Qué no van a hacer estos individuos por un alijo de droga? Este es un tema que debemos recalcar.