Aunque estaba previsto que este viernes a las 11.00, los marineros sirios pisasen tierra tras ser admitida su petición de asilo, al final han decidido permanecer en el barco con el que atracaron en el Puerto de Marín hasta que reciban los emolumentos que se les adeudan.
Así lo confirmaron este viernes. Los siete de sus tripulantes, todos de origen sirio, vieron a última hora del jueves como se confirmaba que la Oficina de Asilo y Refugio (OAR) admitía a trámite su expediente, por lo que los que pasaban a tener la categoría de solicitantes de asilo y ya podían abandonar la embarcación, de la que no pudieron bajar desde su llegada a la villa marinense.
Un portavoz del ITF, la Federación Internacional de los Trabajadores del Transporte, ha informado de que la deuda con los 14 marineros que trabajan en este barco supera los 20.000 dólares. Aunque la armadora ya ha confirmado su voluntad de saldar esta deuda, un problema con el cambio de moneda ha retrasado este pago, ya que el dinero está consignado pero los marineros quieren disponer de los dólares en metálico.
El desembarco estaba previsto para las once de la mañana, momento en el que los tripulantes serían trasladados por la Policía Nacional a otro emplazamiento. También estaba previsto que la organización que, por mandato del Ministerio del Interior, les prestaría ayuda será Accem, cuya sede está en A Coruña y que este viernes entablará diálogo, a través de un intérprete, con los solicitantes.
Accem les ofrecerá una acogida temporal en la ciudad herculina, una medida de primera instancia que les asegura un techo mientras no se les ubica en un centro o piso de acogida definitivo, en el que pasarán el tiempo que tarden las autoridades españolas en dirimir si reciben o no, finalmente, el asilo político. En caso de que acepten la ayuda de la ONG, serán trasladados por la misma a A Coruña. La plaza fija que se les asignará después puede estar en cualquier punto del país y, de hecho, hay altas probabilidades de que se les envíe a sitios diferentes, por lo que tendrán que separarse.
Los responsables de Accem no tuvieron notificación alguna de la decisión ministerial hasta bien entrada la tarde de la jornada del jueves, pero, dada la urgencia del caso, ya tenían todo previsto en caso de que les llegase la noticia. Así, ya tenían solucionada la pernoctación de los marineros, a través de un hostal con el que trabajan regularmente.
