La desgracia ha sacudido esta mañana la localidad coruñesa de Vimianzo, con el fallecimiento en Afganistán del alférez de la Guardia Civil Abraham Leoncio Bravo Picallo, de 33 años de edad y natural de este municipio de la Costa da Morte.
Casi ningún vecino recuerda ya a Abraham, que se mudó a Aranda del Duero, la tierra de su padre, cuando tenía tan sólo tres años, pero esto no ha impedido que su fallecimiento sea el tema de conversación más socorrido esta mañana en toda la localidad.
De hecho, el joven Guardia Civil no conserva ya familiares en este municipio, aunque si en el vecino Cee, donde aun viven dos tíos, Jesús y Juan Picallo, y seis primos, que tienen previsto trasladarse esta misma tarde hasta Aranda del Duero. La familia, conmocionada por el suceso, declina hacer declaraciones, a excepción de su tío Jesús, nombrado portavoz familiar.
Este familiar destaca la entrega y sentido del deber de su sobrino. "Hizo carrera en la Guardia Civil desde muy joven", comenta, "siempre tuvo fervor por este cuerpo, desde jovencito". Así, recuerda que Abraham estaba en Afganistán como voluntario, por "sentido del deber y del cuerpo". "Era una de esas personas convencidas de su trabajo, que amaban su trabajo", resalta.
Guardia Civil desde 1999
Abraham Leoncio Bravo Picallo ingresó en la Guardia Civil en 1999 y en la actualidad estaba también destinado en el Centro de Adiestramientos Especiales de la Unidad de Acción Rural, con base en Logroño. Había sido distinguido con una medalla OTAN. Durante un tiempo, formó parte de los grupos antiterroristas destinados en Bilbao.
Por su parte, el alcalde de Vimianzo, el socialista Alejandro Rodríguez Lema, ha trasladado el pésame a la familia, lamentando "totalmente" lo sucedido. El regidor comentó que el abuelo del fallecido trabajó hace años en el Consistorio de la localidad y su padre en teléfonos en el municipio.