Condenado a 16 años por asfixiar con una cuerda a un anciano de 93 años en Ferrol

El varón que asfixió con una cuerda a un anciano de 93 años en Ferrol para robar en su casa y que se declaró culpable desde el primer momento se enfrentará a una condena de dieciséis años y tres meses de prisión.

El juicio oral celebrado en la Audiencia Provincial de A Coruña por el homicidio de Gumersindo Moreira Seco, de 93 años, un hecho delictivo que continuó con una retención de su mujer, robo en su casa y amenazas a su nieto cuando descubrió a A.F.F en la escena del crimen, ha quedado visto para sentencia, ya comunicada y pendiente de redacción.

La petición del fiscal era de veintiún años de cárcel en total, quince por homicidio, cinco por robo y uno por amenazas -al nieto con el hacha-, mientras que la acusación particular solicitaba que se considerase asesinato y se castigase con 36 años de prisión.

Después de un breve proceso en el que los peritos han confirmado que en la cuerda había ADN tanto de la víctima como del autor, los médicos forenses han atestiguado que esta segunda persona era toxicómano y que después de su ingreso en la cárcel de Teixeiro siguió un tratamiento por este motivo.

También determinaron un déficit en su capacidad intelectual que está relacionado con las circunstancias sociales en las que creció y con su analfabetismo, aunque dejaron claro que puede distinguir el bien del mal en acciones tales como por la que se le juzga.

Él se declaró culpable desde el primer momento tanto del homicidio como del robo, con el atenuante de que podría estar bajo los efectos de las drogas, por lo que finalmente el ministerio fiscal ha solicitado dieciséis años, tres meses y doce días.

Doce son por homicidio, cuatro y tres meses por robo con fuerza en vivienda y los doce días por las lesiones que sufrió la mujer del fallecido.

Tanto la acusación particular como la defensa se adhirieron a esta petición, por lo que a la espera de que la sentencia esté elaborada, será condenado a esa cantidad de tiempo en prisión después de llevar retenido de forma preventiva desde el 27 de marzo de 2012.

Moreira descansaba el 13 de marzo de 2012 delante de la puerta de su casa situada en la parroquia de Pazos, en Serantes, Ferrol, cuando alguien lo sorprendió por detrás, lo asfixió hasta matarlo con una cuerda y entró en su casa para robar.

Su mujer, de 78, estaba dentro de la casa y se quedó maniatada mientras el ladrón se llevaba el botín y cuando localizó a su nieto en el exterior, que llegaba a hacer una visita, lo persiguió con un hacha antes de huir.

La Policía Nacional identificó a A.F.F. como el autor de los hechos después de haber localizado ADN suyo en la cuerda utilizada para matar a Moreira y todo quedó más claro cuando la mujer de este hombre de poco más de treinta años vendió unas joyas que habían sido sustraídas de la casa del fallecido.

Comentarios