Taberna In: cocina casera con sabor a mar

El local, en Porto de Espasante, destaca por su soberbio rollo de bonito, sus chipirones y sus sarteñadas de mar y montaña
Taberna In, en Porto de Espasante. ROCÍO CORTÉS GALDO
photo_camera Taberna In, en Porto de Espasante. ROCÍO CORTÉS GALDO

La Taberna In, en Porto de Espasante, rezuma artesanía, tanto en su estética, con una enxebre combinación de piedra y madera, como en su cocina, donde brillan con luz propia las recetas marineras. Entre ellas sobresale el bonito en rollo, un plato que cada vez se ve menos en las cartas, y que las hermanas Patricia y Mónica Méndez Aneiros sirven con dos pequeños rollos en cada plato con el objetivo de que esté más jugoso. Siguen la receta de su madre, María Josefa, más conocida como Mari de Xan, que abrió este negocio hace 37 años en el fabriquín remodelado por su marido, el pontés Vicente Méndez. Es un local pequeño y recoleto, con pocas mesas en su interior, y una terraza de verano a escasos metros de la playa de A Concha.

En la Taberna In rinden pleitesía a los gustos tradicionales, con productos frescos que saben a lo que son. Este buen hacer se refleja en los excelentes chipirones, fritos en aceite de oliva y con el paladar que les da la cebolla. Es un plato habitual en muchos locales, que aquí se convierte en diferencial por su sabor. Esa misma filosofía culinaria se refleja en los berberechos fritos sobre un lecho de patatas, una receta típica de la comarca del Ortegal.

La sarteñada de mar es otra de las propuestas con mayor demanda. En este caso, los huevos camperos van acompañados de gambas, berberechos y patatas fritas. Los más clásicos pueden optar por la sarteñada de montaña, en la que el picadillo se mezcla con los huevos y las patatas.

La buena mano de las cocineras de esta taberna se aprecia también en raciones convencionales como las zamburiñas o unas soberbias croquetas, que se preparan cada día con uno o dos ingredientes distintos. El relleno de la bechamel suele ser de atún, queso azul, jamón o bacalao. El secreto ibérico y el raxo, que se presenta con pimiento de piquillo y patatas fritas, son las sugerencias carnívoras.

A diario se preparan otros platos, dependiendo del mercado, con un caldo gallego, pulpo a la plancha o algún pescado del día, pero la otra gran especialidad de la casa son las tortillas, que se preparan por encargo.

Fueron estas las que inspiraron a Peter Klaus Noever, Claudio el Alemán como le conocen en la zona y como firma sus obras, para pintar el mural alusivo a la "famosa tortilla gallega" de la fachada del establecimiento. Es también el autor de los cuadros con motivos marineros que ambientan el negocio. Las tortillas son de cebolla, de mar —con gambas y berberechos—, de montaña —con chorizo o torreznos— o de pimiento de piquillo.

La carta de la Taberna In es corta, pero con personalidad propia, lo que invita a probar gran parte de las recetas, al existir la posibilidad de pedir medias raciones. Esta Semana Santa abrirá todos los días. Después el horario de apertura, hasta la llegada del verano, será de viernes por la noche a domingo a primera hora de la tarde.