Acompañados de una intensa lluvia, unos 188 militares de la Brigada de Infantería Ligera Aerotransportable (Brilat) de Figueirido partieron este miécoles de la base militar de Lavacolla hacia Beirut, la capital del Líbano.
Se trata de la tercera de las cinco rotaciones destinadas a esta zona de Oriente Medio para relevar a las tropas españolas en la base 'Miguel de Cervantes'. Con este relevo, la Brilat estará desplegada en el Líbano y Afganistán, a la espera del anunciado repliegue de las tropas que siguen en Kosovo.
En este vuelo viajan otros 34 militares que embarcaron en Barajas pertenecientes a la Agrupación de Apoyo Logístico número 61 de Valladolid y al Regimiento de Caballería Ligero Acorazado 'Lusitania 8' de Valencia, entre otras unidades.
En el contingente de la Brilat, constituido por soldados de Figueirido y de la base asturiana, viajaban además cuatro militares de una unidad salvadoreña que realizó su fase de entrenamiento con la unidad pontevedresa. En total, 17 mujeres integran esta rotación.
Calma inestable
Acompañando a los soldados partió el general José María Prieto Martínez, quien estará al mando de la Brigada Multinacional Libre Hidalgo VIII, integrada por 4.100 soldados de todas las nacionalidades.
El general asumirá a partir del viernes el control del sector Este de la Fuerza Provisional de Naciones Unidas en el Líbano (FINUL). ''La situación es de calma inestable en la zona'', explicó el alto mando militar aludiendo a la proximidad de las elecciones que se celebrarán en junio respecto a lo que vaticinó que se producirán ''las tensiones habituales en los partidos políticos''.
El general lanzó así un mensaje de tranquilidad a los familiares, remarcando que en los últimos cuatro meses ''no ha habido ningún problema'', al tiempo que hizo hincapié en que la dotación parte ''bien preparada y con la satisfacción del trabajo hecho''.
Hasta agosto
La inestabilidad se prolonga en la zona desde la crisis abierta entre el Líbano e Israel en julio de 2006, cuando las tropas hebreas bombardearon las infraestructuras del país desencadenando la respuesta armada de la organización islamista Hezbolá.
La misión, integrada por 1.100 militares, se prolongará hasta mediados de agosto con el objetivo de hacer cumplir la resolución 1701 de la ONU. Los militares españoles trabajarán en esta zona con unidades de Nepal, India, Indonesia, Malasia, Polonia y China.
En los próximos días otros dos relevos saldrán de Santiago para completar el despliegue en la zona.
