Armadores pieden un aumento de la cuota de merluza con ''datos científicos'' en la mano

La Asociación de armadores del caladero de Gran Sol (Anasol) reclama que la UE aplique el mismo criterio, basado en datos científicos sobre poblaciones de las especies comerciales, que en otras ocasiones, para aumentar la cuota de capturas de merluza de este año.

En un comunicado, los armadores recalcan que "los datos científicos justifican" un aumento de las posibilidades de pesca de merluza en 2013, ya que los informes "subestimaron la expansión del stock", y recuerdan que en 2011 sucedió lo mismo con el bacalao del Mar Céltico y la Comisión de Pesca corrigió la cuota ese mismo año.

El Consejo Internacional para la Exploración del Mar (CIEM/ICES) ha elevado su propuesta de pesca de merluza del norte para 2014 en un 80,3 % con respecto a lo que había propuesto para 2013 como una forma de compensar el desfase en el cálculo realizado.

Con todo, Anasol cree que "no es razonable asumir las consecuencias sociales y económicas" de unas posibilidades de pesca en 2013 "muy por debajo de lo que sería asumible desde un punto de vista precautorio y basado en datos científicos".

Por esta razón, suscribe y respalda la iniciativa de los gobiernos de Irlanda y España, que pretenden defender ante el Consejo de Ministros de Pesca de la UE un aumento en las posibilidades de pesca para este mismo año.

Anasol muestra su preocupación ante la posibilidad de que la Comisión de Pesca no realice ninguna propuesta a corto plazo sobre la corrección del TAC de merluza del norte, y porque el asunto no está en la agenda del Consejo para su reunión de octubre.

Abunda en que los "exigentes" planes de recuperación establecidos por la UE han permitido que la biomasa de merluza se haya recuperado en un plazo inferior al previsto por los científicos hasta situarse por encima del rendimiento máximo sostenible y en su mejor situación de los últimos 50 años.

Para el sector pesquero español, estas medidas han significado "grandes sacrificios" desde el punto de vista social y económico, recalca Anasol, que recuerda que la flota ha pasado de los 400 barcos que había en 1986 a los en torno a 100 en la actualidad, con una previsión de "reducirla más a corto plazo".

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