Tradicionalmente los equipos canarios no han encontrado en Lugo una sede propicia para sus intereses. Los representantes de Tenerife han jugado en Lugo en 14 ocasiones para lograr una sola victoria. El único triunfo lo consiguió el Tenerife Baloncesto en la temporada 2003-04, cuando el cuadro entrenado por Paco García se impuso (70-88). Es decir, el actual club, el CB Canarias, y el Tenerife Amigos nunca lograron ganar al Breogán en su ambiente.
El Gran Canaria jugó en Lugo en la máxima categoría, un total de 11 encuentros que se saldaron con nueve victorias de los locales. En lo que hace referencia a los enfrentamientos contra el Breogán, los dos principales clubes canarios coinciden en que fueron víctimas de dos de las más sonadas remontadas del Breogán en toda su historia.
En la temporada 1974-75, dos equipos de Lugo, el Breogán y La Casera, lograron la clasificación para disputar la fase final de Segunda División —que llevaba al ascenso a la máxima categoría—, que se disputaba en Sevilla. Los dos equipos lucenses y el Náutico de Tenerife eran los grandes favoritos. En la segunda jornada, participaban en dicha fase un total de cinco equipos, se produjo el partido más esperado el que enfrentaba al Breogán y al conjunto tinerfeño, para casi todo el mundo una final anticipada.
La expectación era máxima. En Lugo se siguió con especial atención ya no solo por la participación de dos equipos de la ciudad sino también porque en fechas previas al inicio de esta competición la directiva había despedido, con mucha polémica, al entrenador del Breogán, Adolfo Beneyto, sustituido por Josep María Soler, que compaginó la labor de entrenador y la de base del equipo.
El inicio de partido no pudo ser más desalentador para los lucenses. Un primer parcial en los cinco primeros minutos de 1-15 complicaba las expectativas breoganistas, que ya parecían totalmente anuladas al llegar al descanso con 14 puntos de desventaja (27-41).
El Breogán fue otro en la segunda parte. Con Alfredo Aguado realizando una gran defensa sobre el mejor anotador rival, Bethencourt, y Randy Noll y Alfredo Pérez a un excelente nivel, el conjunto breoganista era capaz de empatar a los siete minutos de la segunda parte (43-43) para convertir el resto del encuentro en un auténtico festival para algarabía de los lucenses presentes en la instalación sevillana. Al final, el Breogán se impuso por 21 puntos de diferencia (81-60) tras un parcial en el segundo tiempo de 54-19. El ascenso ya era un hecho.
Muchos años más tarde, en la temporada 2005-06, el Gran Canaria, como cuarto clasificado, visitaba en el Pazo dos Deportes a un Leche Río Breogán que luchaba por escapar de la zona de peligro. El conjunto que dirigía Salva Maldonado llegó a ganar a segundos del descanso por 22 puntos a (25-47). En la segunda parte, el Breogán dio la vuelta al partido para imponerse (71-67). El resultado fue sorprendente —casi tanto como la actuación de Ostojic, con 18 puntos y 10 rebotes—, aunque al final de la Liga aquello no sirvió de mucho.
