Una comisión judicial acude a Ribadeo para investigar la visita del pequeño Nicolás

El juez que instruye la causa autoriza el interrogatorio del presidente de Alsa, del alcalde de la localidad y de los cuerpos de seguridad
Francisco Nicolás Gómez
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El juicio por el que se investiga el supuesto fraude y otro tipo de delitos en el denominado Caso Nicolás prosigue y da un giro por el que vuelve a Ribadeo. El juez Arturo Zamarriego, que instruye la causa dictó una providencia por la que permite a la comisión judicial que se ha creado, trasladarse a la localidad mariñana para tomar declaración a los testigos e implicados en la visita del joven a la villa, a mediados de agosto.

Según el sumario, y como se ha hecho constar ayer en varios medios de comunicación de toda España, Francisco Nicolás Gómez se sirvió de dos vehículos de la policía municipal, de un par de agentes y del boato que acompaña una visita oficial, para dar la apariencia de que era un enviado de la Casa Real aunque finalmente, Su Majestad el Rey, no habría podido acudir.

Este periódico ofreció la primicia sobre su reunión, en el restaurante local San Miguel, con el presidente de Alsa, Jorge Cosmen, quien, extrañado por la parafernalia desplegada, avisó tras comer con el joven, tanto a la Casa Real, como al Gobierno. Dos meses después, Gómez fue detenido.

La comisión judicial se trasladará a Ribadeo para interrogar, no solo al presidente de Alsa, sino también al alcalde, Fernando Suárez; al jefe de la Policía Local, Dositeo Carreira; al responsable del puesto de la Guardia Civil y a los trabajadores del restaurante San Miguel donde comieron Cosmen, el joven Nicolás y supuestos escoltas suyos. Allí le saludó el regidor, esperando encontrarse con un miembro de la Casa Real.

También podrán interrogar a algunos de los periodistas hasta allí desplazados -los medios locales, como El Progreso, se hicieron eco de la llamativa noticia el mismo día en que se produjo-.

La comisión judicial quiere saber qué negocio quería proponerle Francisco Nicolás al presidente de Alsa con la excusa de ser un allegado de la Casa Real y del Gobierno. Este periódico supo que el empresario desconfió en todo momento del joven, ya que tan solo le comentó vaguedades, "cosas que cualquiera mirando la web de la empresa pueda saber" e incluso hablándole de algún proyecto ya cerrado, como el del transporte de la isla de Malta, pero "nada en concreto". Por eso, Cosmen sospechó, tras una comida vacía de contenido y llamó a sus contactos en la Casa Real y en el Gobierno, que aseguraban no conocer al chico, ni saber nada de esa visita.

A la Asociación de la Policía Unificada de Madrid le preocupa que se hubieran utilizado servicios suyos para cometer "una presunta usurpación de funciones públicas" por parte del joven, que pudo haber malversado fondos públicos, al solicitar de Ribadeo el despliegue oficial. El alcalde dice que si le preguntan relatará lo mismo que ha dicho siempre sobre una anécdota a la que no quiere dar pábulo.

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