Teresa Romero: "Supliqué que me ayudaran a morir"

La enfermera de origen becerrense relata su lucha contra el ébola en un revista: "Sentía que la muerte me acechaba, un ente apoyado en mi hombro"
Teresa Romero, a su llegada a los juzgados de Madrid para declarar sobre su contagio
photo_camera Teresa Romero, a su llegada a los juzgados de Madrid para declarar sobre su contagio

Teresa Romero, la enfermera con orígenes en Becerreá que sobrevivió al ébola, narra su terrible experiencia con la enfermedad a través de un artículo publicado en la revista Enfermería Clínica y firmado por tres profesionales del Hospital La Paz-Carlos III. El testimonio de Romero es escalofriante y muy duro. "Era inevitable pensar en los dos pacientes con enfermedad por el virus del Ébola repatriados de África que había atendido y de su triste final. Me veo en el mismo destino, el pánico se apodera de mí, no quiero dormir, sentía que si lo hacía ya no volvería a despertar", rememora la profesional sanitaria. 

"Me confortaba saber que tenía conectada una bomba de perfusión donde se podía leer la palabra morfina"

Uno de los peores momentos llegó el 8 de octubre, cuando sus pulmones empezaron a fallar. "Entonces entraron dos compañeros para aumentar el caudal de oxígeno. Les miré y les supliqué que me ayudaran a morir”, dice. “El resto del mundo no existía, solamente era yo luchando por sobrevivir. Me confortaba saber que tenía conectada una bomba de perfusión donde se podía leer la palabra morfina”, prosigue Romero, que en todo momento, dice, sentía como le "acechaba la muerte" como "un ente apoyado" en su hombro.

Además de contra el miedo y la incertidumbre, también tuvo que luchar contra la soledad, tal y como confiesa: "El resto del mundo no existía, solamente era yo luchando por sobrevivir. Me confortaba saber que tenía conectada una bomba de perfusión donde se podía leer la palabra morfina".

El artículo recoge también el momento en el que le comunicaron que había ganado la batalla: "Yo, lejos de alegrarme por tan esperada noticia, rompo a llorar por el recuerdo de mi perro, ejecutado por las autoridades sanitarias el 8 de octubre de 2014", revela.

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