La ribadense Sonia Castedo ha reaparecido en los medios tras una prolongada ausencia. La exalcaldesa de Alicante ha escogido Espejo Público para dar su primera entrevista tras su renuncia al bastón de mando, que vino motivada por la difusión de sus comprometedoras conversaciones telefónicas con el empresario Enrique Ortiz en el marco de las denominadas operaciones Rabasa y Brugal.
Castedo quiso comentar en el espacio que presenta Susana Griso la reciente muerte de Rita Barberá, con quién se ha comparado y cuyo trágico final, dice, ella ya había imaginado. "Entre todos se ha provocado que Rita muriera de pena y de tristeza", aseguró, añadiendo que ya se había imaginado que el trágico final de la que fuera la regidora de Valencia "podía llegar antes o después". Tras esta reflexión cargó duramente contra los miembros de Unidos Podemos por su actitud de acoso y crítica constante hacia la fallecida y su oposición a que se le dedicara un minuto de silencio en el Congreso.
"De mí dirán, como de Rita, que soy una corrupta y eso ya no tiene solución", afirma en la entrevista, entre lágrimas, sosteniendo que no "hay nada delictivo" en las conversaciones en las que aparece charlando con Enrique Ortiz. Finalmente, sostiene que desde el partido la presionaron para dejar la alcaldía de Alicante asegurándole que su nombre "es una lacra y no todo el mundo se atreve a tener de compañero de viaje una lacra".
