Rajoy se ofrece a Trump como interlocutor de Estados Unidos en Europa y América Latina

El presidente del Gobierno y el mandatario estadounidense mantuvieron una conversación telefónica durante 15 minutos, en la que hablaron sobre las relaciones bilaterales, la seguridad y la economía
Mariano Rajoy y Donald Trump
photo_camera Mariano Rajoy y Donald Trump

El jefe del Gobierno español, Mariano Rajoy, ha trasladado este martes al presidente de Estados Unidos, Donald Trump, que España está en las mejores condiciones para ser un interlocutor de su país en Europa y América Latina, así como en el Norte de África y Medio Oriente.

Rajoy y Trump, tal y como habían avanzado la Moncloa y la Casa Blanca, han mantenido este martes por la noche, durante quince minutos, la primera conversación telefónica desde que el presidente de Estados Unidos sucedió en el cargo a Barack Obama. En ella, según ha informado el Gobierno en un comunicado, han intercambiado puntos de vista sobre las relaciones bilaterales, la seguridad y la economía.

Por su parte, el propio Rajoy ha realizado un comentario en su cuenta de Twitter en el que califica la charla de "cordial" y dice que ha servido para "seguir fortaleciendo las relaciones en beneficio de nuestros pueblos. Somos -añade- países aliados".


Rajoy, según el Gobierno, ha mostrado su disposición a desarrollar una buena relación con la nueva administración estadounidense, mientras que Trump se ha interesado de forma especial por la situación de la economía española. En ese contexto, el jefe del Ejecutivo ha recalcado que España, "con un Gobierno estable y con una economía que crece a más del 3 por ciento, está en las mejores condiciones para ser un interlocutor de Estados Unidos en Europa, América Latina y también en el Norte de África y Medio Oriente".

El comunicado no detalla si los dos dirigentes han hablado de asuntos concretos como la polémica por la intención de Trump de construir un muro en la frontera con México.

En relación con la UE han comentado la situación que se abre con la salida del Reino Unido, y ante el interés de Trump por el futuro de la Europa comunitaria, Rajoy le ha transmitido su convicción de que en los próximos meses se fortalecerá el proceso de integración europea y que España trabajará por ello.

Han comentado igualmente la celebración en mayo de una cumbre de líderes de la Otan que tendrá lugar en Bruselas y que puede ser la primera ocasión en la que ambos se saluden personalmente. Además de la participación de España y Estados Unidos en la Alianza Atlántica, han hablado de la potente relación bilateral de defensa, con las bases españolas de utilización conjunta de Rota y Morón.

En materia de lucha contra el terrorismo de Daesh, han constatado que la cooperación de ambos países es muy amplia y Rajoy ha recordado que los militares españoles están en Irak formando al ejército iraquí para que pueda combatir más eficazmente. Asimismo, España y Estados Unidos mantienen una colaboración muy estrecha en inteligencia y entre sus fuerzas y cuerpos de seguridad.

En el plano económico han certificado que los dos países mantienen unas relaciones de comercio e inversión "equilibradas y beneficiosas". Rajoy ha destacado que en los últimos años la inversión española ha crecido en Estados Unidos hasta alcanzar un stock de 62.000 millones de dólares, lo que ha supuesto crear más de 80.000 puestos de trabajo directos.

En la conversación, según el Ejecutivo, Trump ha aprovechado para transmitir al presidente del Gobierno la cercanía y el afecto de los americanos hacia el pueblo español.

Aunque la de hoy ha sido la primera conversación entre Rajoy y Trump desde que éste accedió a la presidencia de Estados Unidos, ambos ya habían hablado también telefónicamente el pasado 12 de diciembre. Lo hicieron con motivo de una llamada de Trump al presidente del Gobierno en agradecimiento por el telegrama de felicitación que le había enviado tras su victoria en las elecciones estadounidenses. En esa ocasión, según informó entonces el Ejecutivo, ya se comprometieron a mantener el estrecho nivel de confianza en la relación bilateral y preservar la relevancia de la relación transatlántica.

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