Un pozo en el que estuvo el cadáver del pequeño Gabriel Cruz fue revisado por diferentes grupos de la Guardia Civil después de la desaparición del menor. Algunas fuentes de la investigación apuntan a que el lugar fue uno de los que se miraron al día siguiente de la desaparición del niño.
El operativo, formado tanto por especialistas como por voluntarios, buscó durante 13 días al chico, que había desaparecido en un corto trayecto entre la casa de su abuela y de sus padres.
Los agentes detuvieron a Ana Julia Quezada cuando transportaba el cadáver del menor en el maletero de un coche. La Guardia Civil había estrechado el cerco sobre ella durante los últimos días, sobre todo desde que ella misma había encontrado una camiseta interior del pequeño.
En el trayecto que realizó este domingo en el coche, los agentes la siguieron para comprobar si contaba con la colaboración de algún cómplice, aunque de momento investigan si actuó sola o no.
