La Policía Nacional incautó en 2009 numerosa documentación manuscrita en la casa que el presunto cabecilla de la trama de corrupción política Gürtel, Francisco Correa, tenía en la urbanización gaditana de Sotogrande, donde le detuvieron.
Así lo ha testificado este en el juicio una agente que participó en la operación, que ha manifestado: "Correa dijo que no le gustan los ordenadores y que prefiere escribir a mano, y encontramos mucha documentación manuscrita".
La testigo ha relatado que la detención y el registro del inmueble tuvo lugar el 6 de febrero de 2006, mientras que la exmujer de Correa, la también acusada Carmen Rodríguez Quijano, era arrestada en el domicilio del entonces matrimonio en la urbanización La Finca de Pozuelo de Alarcón, en Madrid.
En referencia a la detención de Correa en su residencia de Sotogrande, la testigo ha relatado: "Llamamos a la puerta, entramos, nos atendió, le leímos los derechos, le detuvimos y nos acompañó en el registro de todas las habitaciones".
También han comparecido este lunes en la vista otros seis policías, dos de los cuales han manifestado que durante la detención de Carmen Rodríguez Quijano en la vivienda de La Finca ella estuvo tranquila y colaboró.
Por su parte, el agente que dirigió en la misma fecha el registro en las oficinas de las empresas del entramado de Correa, en la calle de Serrano de Madrid, ha destacado que se llevó a cabo un "tremendo acopio de documentación" y se intervino un "ingente número de documentos", que fueron trasladados a la sede judicial para su reseña, ya que haberlo hecho allí les habría llevado varios días.
Igualmente, han testificado dos policías que participaron en los registros del domicilio del acusado Pablo Crespo, exsecretario de Organización del PP gallego, y en una de las empresas investigadas.
En un momento del interrogatorio el presidente de la Sala, Ángel Hurtado, ha pedido a Pablo Crespo que evitara seguir haciendo gestos, en relación con observaciones que le disgustaban.
En la jornada de este lunes del juicio, la número 72, han comparecido en la vista tres de los 37 acusados, dos de ellos en prisión provisional, el citado Pablo Crespo y Álvaro Pérez, el Bigotes, considerado el "hombre en Valencia" de Correa, además de Isabel Jordán, exadministradora de empresas de la trama, que está en libertad.
Estos tres acusados han acudido obligatoriamente por decisión del tribunal, que entendió que debían estar al centrarse los interrogatorios de los testigos de este lunes en cuestiones que les podían afectar.
La Sala ya comunicó el viernes pasado que seguirá diciendo de forma paulatina los acusados que deberán asistir a cada sesión para evitar lo que ocurrió en dos jornadas de la semana pasada, que se celebraron con la ausencia de todos los imputados, lo que llevó a la Fiscalía y a la Abogacía del Estado a pedir su presencia.
A Correa se le incautaron muchos manuscritos pues no le gusta el ordenador
Testifican en el juicio de la Gürtel los agentes que en participaron en su detención en 2006
