El líder del PSOE, Alfredo Pérez Rubalcaba, ya ha iniciado los contactos con los dirigentes territoriales para diseñar un calendario de primarias que sea del agrado de la mayoría, lo que podría conducir a elegir primero a los candidatos autonómicos, a tenor de las preferencias de algunos "barones"
A la espera de poder hablar con todos los dirigentes territoriales, la dirección federal no se ha decantado todavía por ninguna fecha ni por ninguna de las opciones que están sobre la mesa, que pasan por elegir primero el cartel electoral para los comicios generales o por designar primero a los candidatos autonómicos y los de algunas grandes alcaldías.
La segunda opción, la de que se celebren primero las primarias autonómicas y después las nacionales, parece que tiene cada vez más adeptos entre las distintas federaciones, dado que, además, esos comicios, previstos para mayo de 2015, son antes que las generales, en noviembre de 2015, si Mariano Rajoy no decide adelantarlas.
Dado que también hay un amplio consenso sobre el mes de octubre próximo como el periodo idóneo en el que deberían celebrarse las primarias abiertas para designar al futuro candidato a la Moncloa, todas las quinielas parecen apuntar a que las primarias autonómicas se celebrarían entre junio y julio próximo, según se admite desde varias federaciones.
Podría ser incluso antes de los comicios europeos de mayo en el caso de algunos territorios como la Comunidad Valenciana, donde su secretario general, Ximo Puig, ya ha pedido a Ferraz convocar primarias en el primer trimestre del año, convencido de que el presidente regional, Alberto Fabra, no va a agotar la legislatura.
Así, los partidarios de esta posibilidad quieren que en el Comité Federal del próximo día 18, que es el que cerrará el calendario definitivo con las primarias de todas las elecciones que hay en cartera, deje en manos de las ejecutivas regionales solicitar el adelanto de las suyas si así lo creen conveniente antes de que empiece la campaña electoral de las europeas.
Varias federaciones ven con buenos ojos ese escenario y apuntan a que unas primarias durante estos próximos meses podrían tener un efecto movilizador sobre las europeas y evitar que aumente la abstención, uno de los riesgos más temidos por los dos principales partidos.
El resto de primarias autonómicas y municipales podrían ser entre las europeas y el comienzo del verano, no más allá de mediados de julio, precisan las fuentes, para que no coincidan con las vacaciones.
De este modo, servirían como una especie de "precalentamiento" para las primarias a las generales y conjurar en cierto modo uno de los fantasmas que más teme la dirección federal: la baja participación.
Las primarias abiertas -en las que por primera vez junto a los militantes podrán participar todos aquellos ciudadanos no afiliados al PSOE y que se apunten en una lista- se dejarían para octubre, según el acuerdo implícito que salió de la Conferencia Política de noviembre pasado.
Con todo, la consulta soberanista anunciada por el presidente de la Generalitat, Artur Mas, para el 9 de noviembre, podría dar al traste con estos planes, ya que sería muy difícil que el PSOE organizase unas primarias mientras, de forma paralela, se desata una crisis política nacional por el tema catalán.
¿Obligaría eso a dejar las primarias para comienzos de 2015? Aunque es una hipótesis que casi nadie baraja en el PSOE, algún dirigente se ha apresurado a recordar que precisamente la idea inicial de Rubalcaba era esa. ¿Se saldrá el secretario general del PSOE con la suya?
