Fuente Ymbro, del montón de 2013 a un encierro masificado y sin corneados

Con las imágenes todavía en la retina del montón del encierro del 13 de julio del año pasado, los toros de la ganadería de Fuente Ymbro han vuelto a recorrer las calles de Pamplona en el sexto encierro de los sanfermines, que se ha saldado con tres corredores trasladados al hospital, ninguno corneado.

Haciendo honor a su fama de nobles, los de Fuente Ymbro han protagonizado una carrera limpia y rápida en una mañana complicada por la ligera lluvia que no ha dejado de caer en las últimas horas y por la multitud de personas que aprovechan el fin de semana para acercarse hasta la capital navarra para vivir en primera persona las emociones del encierro.

"Jalado", un toro jabonero de 600 kilos, ha sido uno de los protagonistas de la carrera, al situarse en cabeza en los primeros metros e imprimir una gran velocidad a la torada, una posición que ha mantenido prácticamente hasta el final, ya que incluso cuando la manada se ha reagrupado y los cabestros se han situado por delante, se ha pegado a ellos y así ha realizado el recorrido.

El piso mojado ha añadido peligro a los 848,6 metros de recorrido del encierro, aunque pese a los reiterados resbalones de los toros, ninguno de ellos ha llegado a quedar descolgado y provocar los habituales momentos de peligro que se producen en esos casos.

Y aunque ningún corredor ha resultado corneado, la suerte o el "capotillo" de San Fermín, como se dice habitualmente en estas fiestas, se ha aliado con uno de ellos que ha sido enganchado por un toro castaño por la camiseta, lo que ha propiciado uno de los instantes de mayor tensión.

Pese a la multitudinaria carrera y al peligro del pavimento mojado finalmente solo han sido traslados a los hospitales tres corredores, ninguno de ellos con heridas por asta de toro, que han recibido el alta hospitalaria a las pocas horas.

Se trata de J.B.R., de 26 y natural de Milagro (Navarra), que presentaba un traumatismo en la rodilla derecha; I.Y.I, de 20 años y natural de Huarte (Navarra), que sufría una contusión en el hombro de derecho, y W.V.P., de 43 años de Barcelona, que también tenía una contusión en el hombro derecho.

En los puestos instalados por Cruz Roja a lo largo del recorrido han sido asistidas 65 personas, a las que se han practicado sobre todo curas.

Aunque resulte paradójico, las vaquillas que han sido soltadas en el coso pamplonés tras el encierro han resultado casi más peligrosas que los toros, con un balance de dieciocho atendidos en la enfermería y cuatro trasladados al hospital, dos con traumatismo craneal con perdida de conciencia, uno con un traumatismo toracoabdominal, y un cuarto por una posible luxación de rodilla.

Por la tarde, la fiesta continuará en la monumental pamplonesa, una cita a la que no faltarán las peñas, que con sus pancartas, charangas y meriendas inundarán el tendido de fiesta y alegría.

Allí volverán a oirse los gritos de "illa, illa, Padilla maravilla" dirigidos a uno de sus ídolos, Juan José Padilla, quien este año cobra un especial protagonismo al figurar en el cartel de los sanfermines junto con otros símbolos de las fiestas como San Fermín, Hemingway, un toro, el kiliki Caravinagre y una gaitera.

Completan el cartel Pepe Moral, quien sustituye a David Mora que está todavía convaleciente por la cogida que sufrió en San Isidro, y Jiménez Fortes.

El reconocimiento internacional de los sanfermines atrae todos los años a la capital navarra a personalidades de diferentes ámbitos, como ha sucedido este con el actor estadounidense Charlie Sheen, a quien se ha podido ver disfrutar de la fiesta.

Comentarios