Los famosos citados a declarar este martes en el juicio contra Paco Sanz, conocido como el hombre de los 2.000 tumores, han explicado que están indignados con el acuerdo al que llegó la Fiscalía con los procesados, en el que se solicita una rebaja en la pena de cárcel y han confiado en que devuelva el dinero estafado. Alrededor de las 9.45 de la mañana, el humorista José Mota y los actores Nacho Guerreros y David Muro han llegado a la Audiencia Provincial de Madrid para declarar como afectados tras ser estafados por el hombre de los 2.000 tumores, y han manifestado a los medios su descontento.
José Mota le hizo un ingreso en 2013 de 3.000 euros a Paco Sanz —con el que ha coincidido al entrar al edificio— para que pudiese curarse de su enfermedad supuestamente mortal y, aunque ha confesado que en estos momentos el dinero es lo de menos, ha asegurado que siente "mucha vergüenza ajena porque hay organizaciones y gente que sí lo necesitan".
"Quiero que devuelva el dinero a la sociedad, este tipo de conductas son lamentables. Jugar con la salud y la enfermedad para captar ayuda económica me parece absolutamente horrible", ha sentenciado Mota. A lo que ha añadido que valorará y estudiará el acuerdo entre la Fiscalía y los acusados.
El dinero no iba a ningún tratamiento ni medicamentos sino a ocio como a un crucero, móviles de alta gama y marcas de lujo
Por su parte, el actor de La que se avecina Nacho Guerreros ha calificado a Paco Sanz de "gentuza" y "ser despreciable" al haberse aprovechado de su imagen y su popularidad para llamar la atención de un programa de radio. Y aunque no le estafó dinero, Guerreros utilizó sus redes sociales para hacer un llamamiento a su seguidores y que de esta forma le diesen ánimo y alguna donación a Paco Sanz.
Por este hecho tuvo que pedir perdón a sus fans ya que se sentía "muy culpable" de haber caído en la trampa. Además, ha añadido que no entiende cómo no va a entrar en prisión.
David Muro, actor de la serie Escenas de matrimonio, se ha mostrado "muy indignado" antes de su declaración por el acuerdo con la Fiscalía ya que, en palabras del intérprete, "lo han hecho sin estar los abogados delante". "Se aprovechó de mi imagen", ha manifestado.
El actor ha explicado que "no es cuestión de pedir sangre", sino "justicia" ya que los vídeos que ha hecho con su expareja, Lucía Carmona -imputada también en esta causa- son "indignantes". "Quiero que devuelva el dinero y vaya a prisión", ha concluido.
Lucía Carmona, a la que se le ha rebajado la pena de tres a un año y medio tras el acuerdo, ha llegado a los juzgados acompañada de su letrado, Alberto Martín. Este ha reiterado que su defendida es inocente, que estuvo en tratamiento psicológico y que era la primera vez que se en encontraba con Paco desde la ruptura. "Ha aceptado declararse culpable para evitar riesgos".
