El Senado ha aprobado una reforma legal, consensuada por el PSOE y el PP, que prohíbe la manifestación de los guardias civiles, pues entiende que se trata de un cuerpo de carácter militar y debe, por tanto, en casos de este tipo, acogerse a las mismas normas que las Fuerzas Armadas.
El acuerdo se ha plasmado con una enmienda a la Ley de Contratos Públicos de Seguridad y Defensa, que se ha aprobado este martes en la Comisión de Economía de la Cámara Alta. La enmienda deroga el apartado primero del Artículo 8 de la Ley de Derechos y Deberes de los Miembros de la Guardia Civil aprobada en 2007, que se limitaba a prohibir a los agentes organizar o asistir a manifestaciones de carácter "político o sindical".
Con la modificación del artículo 13.1 del proyecto de Ley Orgánica de Derechos y Deberes de los Miembros de las Fuerzas Armadas, la manifestación del personal de la Guardia Civil en cualquier tipo de acto de carácter "reivindicativo" será catigado por la ley, por lo que sus derechos se ven nuevamente reducidos.
CON ''NOCTURNIDAD Y ALEVOSÍA''
La Asociación Unificada de Guardias Civiles (AUGC), mayoritaria en el Instituto Armado, ha denunciado la inclusión de esta enmienda, advirtiendo la "nocturnidad y alevosía" con la que los dos grandes partidos han acordado esta reforma.
En el debate de la Comisión, el único senador que se ha mostrado en contra de esta iniciativa ha sido Xosé Manuel Pérez Bouza, del BNG. El nacionalista ha reprochado esta decisión, sobre todo, al Gobierno y al PSOE, puesto que se han echado atrás en una de sus promesas electorales: permitir la manifestación del cuerpo de la Guardia Civil. Según ha recordado Pérez Bouza, esta promesa solo se cumplió en 2007, cuando la Ley de Derechos y Deberes de esta institución permitía a sus miembros manifestarse desarmados.
Pérez Bouza ha admitido que la Guardia Civil sigue siendo un cuerpo de naturaleza militar, pero ha subrayado que "no es el ejército" ni sus miembros son militares y ha lamentado que se acabe con un derecho acordado en 2007 que era "adecuado y justo".
En defensa de la enmienda, el senador del grupo socialista, Manuel Arjona, se ha limitado a leerla, sin dar más explicaciones. Quien sí ha respondido a los reproches del senador nacionalista fue el portavoz del PSOE Hilario Caballero, que ha recordado que cuando se votó la Ley Orgánica de Derechos y Deberes de las Fuerzas Armadas se incluyó una enmienda de CiU que pretendía que lo que se legisla para éstas tenga la misma consideración para la Guardia Civil.
El presidente de la Comisión, el senador de CiU, Jordi Vilajoana, ha advertido al inicio del debate que la enmienda consensuada por el PP y el PSOE, que ha contado con un único voto en contra del BNG y la abstención de CiU, puede conllevar problemas técnicos y jurídicos que deberá resolver el Congreso en el último trámite del proyecto.
En este sentido, ha recordado que la enmienda modifica por un lado una ley orgánica a través de una ley ordinaria y, por otro, cambia un proyecto legislativo que también está todavía en tramitación y que, como éste, tiene que pasar por la última votación de la Cámara Baja.
