El juez Silva denuncia las ''presiones'' e ''injerencias'' sobre su trabajo

El juez que ordenó el ingreso en prisión incondicional del expresidente de Caja Madrid Miguel Blesa, Elpidio José Silva, ha defendido hoy que no ha "hecho nada que se separe un milímetro de la legalidad" y ha denunciado "muchísimas presiones" e "injerencias" en su trabajo.

Silva ha respondido a preguntas de los periodistas que desconocía que la Fiscalía estuviese valorando la posibilidad de querellarse contra él por prevaricación tras recibir una denuncia del letrado del banquero por este motivo.

"Contra mí, cualquier querella tendría seguro que estrellarse porque yo no estoy haciendo nada que se separe un milímetro de la legalidad del caso", ha espetado el titular del Juzgado de Instrucción número 9 de Madrid antes de calificar esta postura como una "injerencia".

Además de "injerencias", algo que es "público y notorio" y que "nunca debería haber sucedido", Silva ha afirmado también no sentirse "nada cómodo en la instrucción de esta causa", ya que se siente "sometido a muchísimas presiones" y está "trabajando en condiciones muy difíciles".

Por ello, ha considerado que "el principio de independencia no está funcionando aquí".

"Me tienen que dejar hacer mi trabajo, os tenéis que fiar de mí, el nivel de calidad será todo lo elevado que yo pueda", ha manifestado el juez, que ha recalcado que "ha habido afirmaciones que no eran exactas" y que "el background que se ha tejido alrededor de todo esto no es adecuado".

Ha sido además cuestionado por las recusaciones que ha promovido el abogado de Blesa, que ha alegado entre otros motivos la "enemistad" manifiesta del juez con su cliente.

"El que diga que tengo enemistad con este imputado tiene un gran error cognitivo", ha subrayado.

Preguntado por la posibilidad de que mañana la Audiencia Provincial de Madrid pueda anular la causa en la que investiga la concesión de un crédito de 26,6 millones de euros al Grupo Marsans, que podría extenderse también a la del banco estadounidense, Silva ha contestado que desconocía esta noticia, pero cualquier decisión que tome hay que acatarla.

Además, ha justificado que ordenara la reapertura de la causa del crédito a Marsans en noviembre del año pasado que él mismo había archivado meses antes porque "ha habido un cambio" desde 2008 hasta la actualidad y se ha formado "un escenario completamente distinto".

Durante su ponencia, ha precisado que él considera que "todos los delincuentes son iguales" y no hay diferencia entre quien comete un delito contra la salud pública del que hurta en el metro.

Comentarios