El incendio que ha costado la vida a al menos trece personas este domingo en Murcia no es el único que ha sufrido uno de los locales de copas afectados, la discoteca Teatre. Ya en 2009 tuvo que ser desalojado por un fuego de unos cables que atravesaban su fachada.
Aunque en un primer momento el 112 situó la tragedia de este domingo en la discoteca Teatre, posteriormente la Policía Nacional informó de que el fuego se había iniciado presuntamente en Fonda Milagros y que desde ahí se había extendido a Teatre y a otra discoteca, Golden, frecuentada por la comunidad latina.
En 2009, fue el incendio de unos cables lo que obligó a desalojar como medida de precaución el establecimiento, en ese momento ocupado por unas 50 personas. Ocurrió sobre las 00.25 horas, cuando un problema eléctrico desencadenó el incendio de los cables que atravesaban la fachada de la sala de ocio, por lo que el encargado del local alertó al 092 diciendo que el tejado se encontraba en llamas.
Los bomberos consiguieron extinguir rápidamente y con facilidad el pequeño incendio. Las llamas no produjeron daños personales, aunque el humo se filtró al interior de la discoteca y la Policía Local procedió al desalojó de los clientes que se encontraban en su interior y a cortar la calle.
Los Bomberos consiguieron extinguir el incendio en unos 30 minutos, y técnicos de la compañía Iberdrola se hicieron cargo de la instalación eléctrica, indicando que no había peligro, por lo que los clientes pudieron entrar de nuevo a la discoteca.
Un portavoz de la sala asegura que no ha habido víctimas allí
Ninguna de las trece personas que han perdido la vida en el incendio de este domingo estaban en la sala Teatre, según ha informado a Efe su portavoz, María Dolores Abellán, que subraya ante la tragedia que "hay que lamentar las pérdidas humanas, no las materiales".
Abellán, desde los accesos a la zona del siniestro, ha señalado que el fuego no se originó en su local, y ha agradecido la labor de las fuerzas de seguridad, del personal sanitario y de los bomberos que se desplazaron al área de copas de la ciudad de Murcia a las seis de la mañana, cuando se declaró el fuego y numerosas llamadas de auxilio movilizaron al 112 y a la Policía Nacional.
Ha trasladado el pésame a las familias y ha mostrado su preocupación por el estado de los cuatro heridos en el incendio, que se originó en el contiguo restaurante Fonda Milagros.