La alcaldesa de Maracena niega su implicación en el secuestro de una concejala

Cree que estos hechos "perturban" las elecciones del domingo
La alcaldesa de Macarena, ante los medios. EFE
photo_camera La alcaldesa de Macarena, ante los medios. EFE

La alcaldesa de Maracena (Granada), Berta Linares (PSOE), ha negado cualquier implicación en el secuestro de la concejala Vanessa Romero, por el que está en prisión el que era su novio, y ha lamentado que el final del secreto de sumario perturbe el 28M, marque su imagen y le prive de unas elecciones limpias.

Linares ha hecho estas declaraciones en una comparecencia ante los medios, en la que no ha permitido preguntas, que se ha producido un día después de trascender que el Juzgado de Instrucción 5 de Granada la considera presunta inductora del secuestro junto al secretario de Organización del PSOE-A, Noel López, y al concejal de Urbanismo de Maracena, Antonio García Leyva.

La alcaldesa ha reconocido su sorpresa por los plazos judiciales y ha criticado que se levante el secreto de sumario a "dos días" de las elecciones, lo que ha pronosticado tendrá un impacto en los resultados.

Ha defendido la inocencia de los tres socialistas vinculados a la retención ilegal de la concejala de Maracena, ha adelantado que colaborará con la justicia y ha criticado el daño a su imagen y que la priven de unas elecciones transparentes y sin mancha.

"Me llama enormemente la atención, como podéis imaginar, que después de tres meses de prorrogar un sumario, a dos días de las elecciones se abra. Me parece increíble, lo único que va a conseguir es perturbar el resultado de unas elecciones", ha destacado al alcaldesa socialista de Maracena, que ha sido recibida con aplausos en un salón del Consistorio.

Visiblemente afectada, ha pronosticado que el tiempo demostrará su inocencia y ha lamentado que, cuando eso ocurra, nadie podrá devolverle unas elecciones "limpias".

Ha adelantado que los abogados de los tres socialistas están examinando las diligencias para estudiar las posibles alegaciones al proceso, pero se ha desvinculado por completo de la retención de la concejala y compañera de partido.

Ni indicios ni pruebas

"No hay un solo indicio ni prueba que nos incrimine a ninguno de los tres", ha resumido Linares, que ha recalcado que no están "ni imputados ni investigados ninguno de los tres".

Estas declaraciones se producen después de que se conociera el jueves que el Juzgado de Instrucción 5 de Granada encargado de la detención ilegal ha elevado la causa al Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA) para que deduzca testimonio, como aforado, al parlamentario y secretario de Organización del PSOE andaluz, Noel López, a la alcaldesa actual, y al concejal de Urbanismo, Antonio García Leyva.

El juez ve indicios de que los tres pudieron actuar como presuntos inductores del secuestro que materializó el que entonces era novio de la alcaldesa, Pedro Gómez Rosa, que es de momento el único investigado en la causa y permanece en prisión provisional desde que ocurrieron los hechos, el pasado 21 de febrero.

"Me parece increíble que toda la acusación que se esta vertiendo contra nosotros solo está cogida por una persona que era mi pareja en su momento, una persona que reconoce que está mentalmente desequilibrada, que reconoce un trastorno bipolar, y le estamos haciendo caso", ha aclarado Linares.

Estrategia del investigado

La alcaldesa ha interpretado que, al presentarlos como inductores, su expareja y el abogado que le representa buscan "salir de prisión".

Ha pedido además a sus vecinos "máxima tranquilidad", ha asegurado que el día del secuestro colaboró con la Guardia Civil y que lo seguirá haciendo, y ha dicho que López, García Leyva y ella declararán para poder dar las explicaciones que hasta ahora no han podido ofrecer.

Además, ha pedido a la oposición, y especialmente al PP, "menos acusaciones y menos falsedades" y ha criticado que pretendan "ganar en los juzgados" lo que no consiguen con buena gestión.

El día de los hechos, el pasado 21 de febrero, Gómez Rosa retuvo con un arma blanca y una pistola simulada a Vanessa Romero, concejala y compañera de la alcaldesa en el equipo de gobierno, con quien mantenía enfrentamientos previos y de quien supuestamente temían que hiciera públicos expedientes sobre urbanismo que comprometerían la gestión de López y Linares al frente del Ayuntamiento, según consta en el auto judicial con las declaraciones de ambos.

En un encuentro previo en un restaurante entre el investigado, Noel López, la alcaldesa y el edil de Urbanismo, estos tres le propusieron supuestamente dar un "susto o escarmiento" a la concejala, llegándole a suministrar Linares, siempre según su testimonio, "una bolsita de cocaína de parte de Noel", una semana después de aquella reunión, para que "se la tomara y se envalentonara" el día que cometiera los hechos.