Ocho concellos de Lugo afrontan el fin de campaña con las espadas en todo lo alto

Lugo, Sarria, Monterroso o Ribadeo protagonizan las principales batallas electorales
Imagen de archivo de una persona votando. VICTORIA RODRÍGUEZ/AEP
photo_camera Imagen de archivo de una persona votando. VICTORIA RODRÍGUEZ/AEP

Ocho concellos de Lugo, entre los que están importantes plazas como la propia capital, Sarria, Monterroso o Ribadeo, afrontan la última semana de campaña con las espadas en todo lo alto. Así están las cosas en las principales batallas electorales.

Lugo

El PP, con 15.360 votos en 2019, tiene que acercarse a los 21.000 para hacerse con la mayoría absoluta. Los populares calculan que están a medio millar de ese objetivo, pero quitarle gran parte de los sufragios y dos ediles a Ciudadanos no sería suficiente. Corren también el riesgo de que los restos que obtengan Cs y Vox les dejen a las puertas de la victoria, como le sucedió a Jaime Castiñeira en 2011, perjudicado por los 700 apoyos al Fli, ahora integrado con los populares. Era un escenario parecido, de subida del PP a nivel nacional. Otra situación que beneficiaría al PP es que la ‘ciudadana’ Olga Louzao lograse un acta, algo que no resulta descabellado, y ellos mantuviesen doce, aunque fuese de forma ajustada.

Por la izquierda, el PSOE trata de evitar la pérdida de uno de sus ocho ediles y lucha por reeditar el gobierno de coalición con el BNG. Los nacionalistas confían en pescar en el caladero del desaparecido Lugonovo e incluso votantes de Unidas Podemos. El sorpasso a los socialistas es el objetivo de Rubén Arroxo pero también un recurso del BNG para atraer sufragios en la bolsa de 3.707 votos que sumaron Lugonovo (1.325), Podemos (1.900) y Esquerda Unida (1.582). Estas dos últimas formaciones acuden unidas en un intento de lograr representación.

Sarria

El problema será el día después en un municipio donde no se prevén mayorías y se antoja imposible un pacto entre Camiña Sarria, que encabeza el regidor Claudio Garrido, y el PSOE de Benjamín Escontrela. Así lo dan a entender la sonada ruptura y el cruce de acusaciones entre ambos. Escontrela trae adeptos a su nuevo partido y está haciendo una buena campaña. La subida del PSOE parece evidente, pese a la traumática renuncia de su ejecutiva local. El BNG, como mínimo, se mantendrá.

La popular Carmen José López aspira a ser la más votada, pero le resta posibilidades de mayoría absoluta José Manuel Bello al frente de Cs, aunque no logre acta. Bello fue decisivo en la elección de Fernando Carlos Rodríguez como presidente de la gestora popular en contra del candidato propuesto por la dirección provincial y, al verse fuera de la renovación posocialispular, impulsó la de Ciudadanos. Ya en 2007 evitó que Fernando Carlos Rodríguez lograse el bastón de mando con una maniobra similar.

Vilalba

El PSOE parte como favorito y aspira incluso a la absoluta. El esfuerzo en el asfaltado de pistas rurales, con tres empresas trabajando en los últimos meses y una elevada inversión, le dará réditos. Aún no terminó la semipeatonalización de la Rúa da Pravia, ya que quedan pendientes las rotondas de sus cabeceras, y se nota el cambio de la fisonomía urbana.

El PP pierde fuerza en las parroquias, donde antaño arrasaba. Su alcaldable, Sandra Vázquez, tiene difícil alcanzar los siete representantes. Resultó extraño que no buscasen el apoyo del exalcalde Agustín Baamonde, ausente en la campaña. El silencio de la familia Camba, como es conocida su familia, es significativo. Las polémicas en campaña del número dos, Álvaro Fraga, tampoco ayudan.

Vilalba Aberta pelea para conservar sus dos ediles y baraja subir uno, apostando por la cara amable de su candidato, Modesto Renda. Si el BNG saca representación, después de quedar a pocos votos hace cuatro años, ambas fuerzas podrían ser llave.

Monterroso

De no alcanzar la mayoría absoluta el socialista Antonio Gato, que regresó al PSOE, con el que fue alcalde desde 1999 a 2015, el futuro gobierno local dependería de que se repitiese la actual coalición del PP con Independientes por Monterroso o bien de un pacto de izquierdas si entran el Partido Galego, encabezado por el edil Xabier Vázquez, o el BNG.

Viveiro

Es otro de los municipios donde parece difícil que haya mayoría absoluta. El PSOE es el partido mejor colocado para que María Loureiro repita como alcaldesa. Mariña Gueimunde aparece como una persona con arraigo y capaz de revitalizar el PP, pero dos meses de campaña es poco tiempo, aunque gane apoyos.

Las incógnitas son la resistencia de la lista Por Viveiro, de Bernardo Fraga, que tratará de aguantar sus dos ediles, y de la nacionalista Miriam Bermúdez. Más complicado es que entren en la corporación Podemos y Vox.

A Fonsagrada

Como siempre decisiva en la elección de diputado por su partido judicial y donde parece previsible la victoria del PSOE. Su cabeza de lista y alcalde, Carlos López, intentará sacar fruto de su trabajo en la zona rural, lo que le ayudaría a mantener la mayoría aunque el popular Bernardo Niño tenga tirón en la villa.

Chantada

La presencia del ex de Inta Juan Carlos Varela (Chantada Centro) y de Antonio Ledo Prado (Xuntos polo Cambio), con listas donde aparecen personas relevantes al PP, hacen peligrar la mayoría absoluta del líder de este partido y alcalde, Manuel Varela. También juegan su papel las candidaturas por la izquierda.

Ribadeo

En Ribadeo todo apunta a una subida del PP, que tendrá que remar mucho para pasar de los cuatro a los siete ediles para gobernar en solitario. La marcha del alcalde, Fernando Suárez, genera la incógnita sobre el tirón de su sustituto al frente del BNG, Pablo Vizoso. Los nacionalistas tienen complicado gobernar en solitario, como ahora, pero podrían coaligarse con el PSOE.

...Y otras pequeñas batallas también están en el aire

Samos

El fichaje por el PP de Miguel Gallego, hijo del alcalde socialista, Julio Gallego, le otorga posibilidades a esta candidatura de alcanzar el sillón con el apoyo paterno al alcaldable. El PSOE sufre la reciente ruptura, lo que abre las posibilidades de que un BNG en alza encabece una posible coalición de izquierda si el PP no alcanza la mayoría absoluta.

Quiroga

La incógnita es cómo afecta a la amplia mayoría del PP la marcha de Julio Álvarez, alcalde 36 años, al que sustituye como candidato José Manuel Pol, y la escisión protagonizada por los concejales José Luis Rivera y Luis Manuel Arias, que integran la lista Independientes por Quiroga, con la aspiración de ser llave de la gobernabilidad.

O Páramo

Si en 2019 la lista Todo polo Páramo igualó a cuatro ediles con el PP y los socialistas ejercieron de jueces para formar gobierno, la batalla se presenta abierta de nuevo. Los concejales independientes, con el alcalde José Luis López a la cabeza, se integraron en el PP , y el veterano exregidor Gumersindo Rodríguez dejó este partido para presentarse por Alternativa Veciñal, con una candidatura que incluye a algunos familiares.

O Incio

El PP ganó por cinco votos la alcaldía de O Incio hace cuatro años. Ahora puede pasar cualquier cosa, no solo en la lucha entre PP y PSOE, sino también si el BNG obtiene representación.

Paradela

El empuje de Iván Castro augura un buen resultado para el PSOE en Paradela. El popular Mato, con el bastón de mando desde 1979, es favorito pero hay indicios de que se estrechará su ventaja en sufragios.

O Valadouro

Reñidos están los comicios de O Valadouro, donde el popular José Manuel Lamela tiene opciones de pelear la mayoría absoluta ante PSOE y BNG. Al alcalde socialista, Edmundo Maseda, puede pasarle factura un mandato accidentado.

Rábade

Francisco Fernández Montes gobierna en alianza con el PSOE, pero el PP arañó votos en las últimas citas electorales hasta el punto de quedar cerca de la mayoría en 2019. De ahí la incertidumbre del resultado.

O Corgo

Felipe Labrada, regidor del PP, aspira a la mayoría absoluta, favorecido por el hecho de que no presente candidatura Javier Vila, que en anteriores citas estuvo al frente de distintas siglas, la última de ellas Ciudadanos. Al PSOE le perjudica la presencia de su exedil Nuria Mera al frente de la sita Adiante Corgo-Contamos y el BNG podría alcanzar dos concejales.

Antas de Ulla

El pulso PP - PSOE es directo y más intenso que nunca, con el respaldo de fuertes inversiones tanto de la Xunta popular como de la Diputación socialista. Parten del 737 del PP y del 594 del PSOE en 2019, y habrá que ver a donde van a parar los 187 votos de Alternativa Veciñal de Antas. Al obtener un edil esta formación, el PSOE se quedó en el reparto de actas a cinco votos del PP para el quinto edil. Ahora es un mano a mano entre el popular Javier Varela y la socialista Pilar Porto.

Portomarín

La presencia de la lista de Roberto Rodríguez al frente de Terras de Portomarín juega en contra del PP si el exedil popular e hijo de Eloy Rodriguez, regidor durante 30 años, consigue al menos acta. El regidor, Pablo Rivas, que sustituyó a mitad de mandato a Juan Serrano, se estrena como alcaldable del PP , con la confianza de mantener los cinco ediles que en 2019 le dieron la mayoría a su partido frente a los cuatro del PSOE.

Negueira de Muñiz

El socialista José Manuel Braña se impuso por seis votos a la lista de Negueira Viva, que renueva su candidatura. El PP intentará mejorar los resultados de 2019. El sistema de elección es de listas abiertas y cada votante puede marcar el nombre de cuatro candidatos.

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