Los simpatizantes del PPdeG abarrotaron este el auditorio de la facultad de Veterinaria para arropar a Elena Candia en su mitin central de campaña. Esto no es ninguna novedad porque ese auditorio es para el PP local como la plaza de toros de Valencia para el PP nacional, todos los líderes la han llenado. La diferencia esta vez estuvo en el entusiasmo que se palpaba entre ellos, muchos sentados en las escaleras del foro o de pie por carencia de asientos.
Un ardor que la candidata va a necesitar para alcanzar la mayoría absoluta. Los diez concejales con los que parte prácticamente se los aseguran la implicación que los suyos exhibieron este jueves. Lo más difícil, y todos eran también conscientes, son los otros tres.
El primero en reconocerlo, el propio presidente del PPdeG y de la Xunta Alfonso Rueda: "Foi unha progresión do voto por días" afirmó, "pero os últimos son os que máis custan". Cree el líder popular que están en el buen camino, porque Elena Candia ganará seguro porque así lo han dicho las encuestas desde el primer día, "pero todos sabemos que para o PP iso non é suficiente. Hai que empuxar, empuxar e empuxar, como fai Elena".
Rueda demostró una vez más que su apuesta por Candia es incondicional. Alguno de los presentes bromeaba con que incluso podría haber votado por ella si se llega a empadronar en Lugo, de las veces que el presidente ha visitado la ciudad y la provincia en los últimos meses. "Se tivésemos nos 113 concellos a unha candidata como ela, estariamos a piques de gañar en todos", confirmó él, que negó que Candia sea la Ayuso de Lugo, como una vez le dijeron, sino que "Ayuso é a Candia de Madrid".
Entre el sinfín de cualidades que percibe en la aspirante, Rueda destacó su energía e inconformismo, con una mentalidad de victoria inquebrantable. "A vitoria de Candia abrirá oportunidades para Lugo. Esta cidade necesita aire fresco, pódense conseguir máis cousas. Para iso fai falta liderado e capacidade de xestión, como ela demostrou", opinó.
Habló también de cómo es de "enérxica" a la hora de pedir cosas para Lugo, hasta el punto de que le tiene que decir: "Elena, para un pouco, que non estás ti sola". Por eso y porque Lugo y Candia se merecen una oportunidad reclamó un último esfuerzo a sus simpatizantes: "Estamos a ver se chega o concelleiro de maioría".
Algunas de esas virtudes que había alabado Rueda quedaron después patentes en la intervención de Elena Candia. Sobre todo su energía, que cuando mitinea se convierte en una voz decidida que habla en un mantenido tono alto como de echar la bronca. No le resta, por lo que se vio, eficacia en el mensaje: "Podo sentir que o cambio está preto", aseguró tras recibir el cariño de los suyos. "O PP tivo moitos acertos e tamén algúns erros, pero sempre mantendo unida á familia do PP", añadió.
La aspirante a recuperar para su partido una alcaldía que se le niega desde hace más de dos décadas explicó el proceso iniciado con el anuncio de su candidatura el pasado verano: "Empecei porta a porta, barrio a barrio, parroquia a parroquia escoitando a todo o mundo. Participou moitísima xente. O que me pediron é un goberno para as persoas, que priorice a seguridade e cree oportunidades para a xente. Esa será a nosa acción de goberno".
La parroquia se venía abajo cuando Candia soltó, con un tono aún más alto, la frase más aplaudida de la noche: "Faremos un Lugo máis cómodo e sen carril bici. Hai que rectificar o erro e ímolo facer", dejando claro por dónde sangran las aspiraciones de Lara Méndez, de quien su rival advirtió que "nunca houbo tanta similitude como esta vez entre votar a Lara Méndez e votar a Pedro Sánchez".
No faltó el repaso de rigor a las propuestas genéricas del programa para convertir Lugo en un oasis de empleo, oportunidades para jóvenes, barrios cuidados, parroquias equipadas, calles seguras y residencias para mayores, por lo que agradeció a Rueda la que Amancio Ortega está haciendo en A Residencia.
Y no solo eso, sino que en su promesa de un Lugo para todos los artistas locales, adelantó una invitación para el líder del PPdeG: "Espero, presidente, que inaugures comigo o auditorio. "Non podemos dar nin un voto por ganado nin por perdido", despidió al auditorio, "Témolo moi preto. Imos facer historia. Desta vai".
