Una veintena de trabajadores de Cedonosa, la firma de cerámica radicada en Catoira (Pontevedra), se concentraron esta la mañana del jueves ante la sede de Audiencia Provincial de Pontevedra para exigirles a los administradores concursales de la empresa que les abonen las indemnizaciones, de una media de 22.000 euros por trabajador, que se les adeudan.
Según indicó el portavoz de los trabajadores, Ramón Conde, esas indemnizaciones económicas fueron acordadas por la empresa y la plantilla -formada por unos 80 trabajadores-, y a pesar de ser ''una cantidad ridícula por 30 o 40 años de trabajo'', la intervención concursal de la empresa ha impedido que los trabajadores cobren más allá del 20 por ciento de estas cantidades.
Primero pagar a Hacienda
Ramón Conde explicó que los administradores concursales han informado a los trabajadores de que Cedonosa tiene que pagar a la Hacienda pública y a la Seguridad Social antes de poder indemnizarlos. Así las cosas, los trabajadores no entienden ''por qué entonces un juez nos dijo que si firmábamos esas indemnizaciones tan bajas íbamos a cobrar''.
''Al final parece que da igual lo que firmes o lo que hagas, esto no tiene solución'', indicó el portavoz de la plantilla, quien sin embargo desveló que en las cuentas de la empresa hay 1,2 millones de euros ''de los que se puede disponer de forma inmediata', que junto con los 700.000 euros del Fondo de Garantía Salarial ''es suficiente para que los trabajadores reciban el dinero que les pertenece''.
Conde lamentó que la ''buena fe'' de los trabajadores al suspender las movilizaciones delante de la fábrica para no entorpecer las negociaciones para su venta ''no ha servido para nada''. Criticó que tampoco se haya puesto en venta la maquinaria de la fábrica, lo que permitirá liquidez a Cedonosa, ''por falta de interés''.
