El Gobierno y los sindicatos escenificaron este miércoles el acuerdo al que llegaron para la segunda y última pata de la reforma de las pensiones tras algunas incorporaciones de última de hora exigidas por CC.OO. y UGT. Una de ellas garantizará que las pagas mínimas de jubilación contributivas para mayores de 65 años con cónyuge a cargo aumentarán hasta los 1.178,5 euros al mes –en 14 pagas– entre 2024 y 2027, lo que supone un 22% más que ahora.
Lo que recoge el nuevo marco es que la cuantía de la pensión debe alcanzar el 60% de la renta mediana de un hogar formado por dos adultos, lo que supondrá 16.500 euros anuales en 14 pagas en 2027 según los cálculos ofrecidos el miércoles por el ministro de Seguridad Social, José Luis Escrivá, en la comisión del Pacto de Toledo en el Congreso. Al mes serán esos 1.178,5 euros, frente a los 966,2 en los que se sitúa en la actualidad la paga mínima con cónyuge a cargo.
El nuevo marco que el Gobierno aprobará este jueves vía decreto ley en un Consejo de Ministros extraordinario también recoge una subida de las mínimas no contributivas, que tendrán que converger en 2027 "en el 75% del umbral de pobreza de un hogar unipersonal". Pasarán así de los 6.784 euros anuales actuales a cerca de 8.300 euros dentro de cuatro años o, lo que es lo mismo, unos 593 euros al mes.
La de las pensiones era una de las grandes reformas que el Ejecutivo tenía pendiente cerrar, y con rapidez, pues de ella dependía que España pueda acceder a un nuevo tramo de los fondos europeos Next Generation. La Comisión Europea ya le dio su bendición tras el consenso entre los dos socios en el Gobierno de coalición –PSOE y Unidas Podemos–, que consiguió el apoyo de los sindicatos pero no de la patronal. La CEOE censuró que, en su objetivo de reforzar los ingresos de un sistema cuya sostenibilidad futura se ve constantemente cuestionada, haya apostado por subir las cotizaciones que pagan las empresas, sobre todo, pero también los trabajadores.
Frente a las críticas de los empresarios, Escrivá esgrimió que con la reforma las cotizaciones por hora trabajada subirán 37 céntimos hasta 2050, hasta los 6,37 euros, por lo que defendió que el impacto será "limitado".
Una de las novedades que trae la reforma es la relativa al periodo de cálculo de las nuevas pensiones de jubilación. Hasta 2043 se elegirá entre el modelo actual, en el que se tienen en cuenta los últimos 25 años cotizados, y el nuevo, que pasa por computar los últimos 29 años de vida laboral, pudiendo descartar los dos peores. Con todo, la implantación de esta nueva fórmula será progresiva, durará doce años a razón de cuatro meses cada año a partir de 2027, de modo que acogerse a ella no será del todo posible hasta 2038. Será la Seguridad Social la que calcule de oficio cuál será el modelo más beneficioso para el trabajador en el momento de su jubilación.
Los líderes de CC.OO. y UGT destacaron que la reforma garantiza a los jóvenes "pensiones dignas".
Cotizaciones. Las tres vías para generar ingresos extra con los que blindar las pagas
Si el sistema de pensiones ya no anda sobrado de fondos –de hecho, el Estado tiene que prestar cada cierto tiempo dinero a la Seguridad Social para abonar las pagas–, la jubilación de los baby boomers en las décadas de 2030 y 2040 elevará la factura para las arcas públicas. Para poder afrontarla, la segunda pata de la reforma recoge tres medidas para reforzar los ingresos.
Sobrecotización del Mei
Una de ellas es el incremento del mecanismo de equidad intergeneracional (Mei), esto es, la sobrecotización anual del 0,6% que se abonará al menos hasta 2033 y que se elevará progresivamente hasta el 1,2% en 2029, a un ritmo de una décima por año.
Bases máximas
Otra de las medidas es un incremento de las bases máximas de cotización con el IPC más una cuantía fija de 1,2 puntos entre 2024 y 2050. Actualmente se sitúan en 4.495,5 euros al mes.
Cuota de solidaridad
Como novedad, se crea una cuota de solidaridad para la parte del salario que actualmente no cotiza por superar el tope máximo de cotización. La medida afectará a los trabajadores que más ganan. Será del 1% en 2025 e irá aumentando a un ritmo de 0,25 puntos por año hasta llegar al 6% en 2045 –un 5% a cargo de la empresa y el 1% restante recaerá sobre el trabajador–.
