Un informe elaborado por la consultora PwC certifica un incremento de un 11% en el impacto directo de la marca sobre el PIB gallego en un año. En concreto, en el último ejercicio fiscal (marzo 2020 - febrero 2021), el impacto directo pasó de los 34,2 millones de euros de 2019 a representar 37,9 millones de euros.
Si a estas estadísticas se les agrega la repercusión indirecta e inducida, el total asciende a 353 millones de euros, lo que supone casi 16 millones de euros más que el periodo anterior, informa la compañía.
Estos resultados totales alcanzados, que mejoran en cerca de una décima la aportación de Lidl al PIB gallego (de 0,57% a 0,66%) se deben, fundamentalmente, a tres factores: el apoyo en materia de empleo, la compra a proveedores gallegos y nuevas aperturas y modernizaciones de tiendas.
En este sentido, el estudio de la consultora también refleja un crecimiento de un 10,7% en los puestos de trabajo directos durante el año fiscal 2020, que rozan el millar. Sumados los indirectos, el impacto global es de unos 8.000.
El crecimiento queda patente en las cuatro áreas gallegas. En concreto, la de A Coruña destaca por su aportación global al PIB (representa unos 145 millones de euros de los 353 de toda la comunidad debido, en parte, a su plataforma logística de Narón, que abastece a su red de tiendas gallegas, asturianas y a parte de Castilla y León).
Mientras, la de Pontevedra, la que cuenta con más puntos de venta, es la que abandera la creación de puestos de trabajo, al asumir prácticamente uno de cada dos empleos directos generados en la Comunidad entre los años fiscales 2019 y 2020, lo que le permite representar un 0,80% del impacto total de la provincia.
Por su parte, Lugo y Ourense también despuntan en esta mejora ya que, como subraya el director regional de la marca en Galicia, Jaime Herrá, "solo en impacto indirecto e inducido nuestra aportación al PIB en estas dos provincias ha crecido en total casi cuatro millones de euros".
