Gayoso admite "errores" en la gestión de las cajas y pide "perdón" por sus "equivocaciones"

El expresidente de Caixanova y excopresidente de Novacaixagalicia comparece en la comisión que investiga en el Congreso la crisis y la reestructuración del mapa financiero

Julio Fernández Gayoso. EP
photo_camera Julio Fernández Gayoso. EP

El expresidente de Caixanova y excopresidente de Novacaixagalicia, Julio Fernández Gayoso, realizó este martes un ejercicio de cierta autocrítica con la gestión realizada en las cajas de ahorros y pidió "perdón" por las "equivocaciones” que cometiese en su carrera profesional. Fue durante su comparecencia en la comisión que investiga en el Congreso la crisis y la reestructuración del mapa financiero, en la que el exbanquero vigués de 86 años señaló varias medidas que a su juicio deberían haber tomado las cúpulas de las cajas para evitar su caída y desaparición. Entre ellas apuntó a endurecer con anterioridad la política de concesión de créditos, no abrir y cerrar oficinas que no resultaban rentables en pueblos pequeños, o reducir los fondos destinados a la obra social.

Durante casi dos horas de intervención en las que respondió a las preguntas de los grupos parlamentarios, Gayoso también incluyó en la lista de "errores" la comercialización de las participaciones preferentes, aunque matizó que Caixanova actuó "de buena fe" y que, en su caso, el uso que se hizo de estos productos complejos había sido "limitadísimo", representando en torno al 1% del balance.

Tampoco esquivó en su turno de respuesta los polémicos retiros dorados, que lo llevaron a él y a otros integrantes de la caja fusionada a prisión por las millonarias indemnizaciones con las que salieron de la entidad en septiembre de 2011 tres ejecutivos. Tras apenas medio año en la cárcel por ser considerado un colaborador necesario en la modificación de los contratos de alta dirección que dieron lugar a esos retiros, Gayoso, en régimen de semilibertad desde agosto, insistió en que la decisión se basó en lo que el Banco de España y los asesores jurídicos de la entidad "decían que había que cumplir". Subrayó, en este punto, que él no había percibido "ni un solo euro".

El exbanquero volvió a mostrar su rechazo a la fusión de las cajas gallegas por el impacto sobre el negocio y el empleo que suponía unir dos entidades de la misma comunidad. Volvió a señalar que la vía más adecuada hubiera sido la fusión con otras cajas españolas, una opinión que afirmó que compartía el Banco de España.

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