"El gasto en gas y luz se nos ha multiplicado por cinco; perdemos mercados de exportación"

La Real Fábrica de Cristales de La Granja (Segovia), la sede de la Xunta en Santiago, la catedral compostelana, un resort de Punta Cana, el Four Seasons de Disney World, en Orlando, y varias mansiones en Miami tienen algo en común: un tejado 'made in Mesía'. Con capacidad para fabricar 50 millones de tejas al año y 65 empleados, Tejas Verea trata de sortear la crisis. 
Luis Verea, director general de Tejas Verea.EP
photo_camera Luis Verea, director general de Tejas Verea. EP

Franco y cercano en el trato, Luis Verea (Boimorto, 1957) representa a la cuarta generación de una familia de tradición ceramista cuyo sello está estampado en buena parte de las cubiertas de Galicia. Desde Mesía, un concello de la comarca de Ordes que no llega a los 2.500 habitantes, pilota una compañía que en 2021 facturó unos 15 millones y que apuesta por la innovación, llegando a crear acabados con colores adaptados a cada zona geográfica. Con gran vocación exportadora, la compañía tiene ahora en los costes energéticos su principal quebradero de cabeza.

Con 55 años de historia, ¿cuáles son los retos de futuro de Tejas Verea?

Seguir creciendo. Acabamos de poner en marcha una línea de producción para hacer un formato de producto nuevo, una teja plana que queremos introducir en los mercados en los que estamos. Quizá es el reto más destacado que tenemos ahora, aparte de superar todas las dificultades que estamos teniendo por los costes energéticos.

Los precios de la electricidad han puesto contra las cuerdas a la industria cerámica. ¿Hasta qué punto se os ha disparado la factura?

Nuestro gasto más relevante es el del gas, seguido de la electricidad, pues cocemos las tejas con ese combustible. Tanto la partida de la luz como la del gas se nos han multiplicado por cinco. Así que estamos resistiendo. Parece que este mes se están relajando algo los precios. Lo que hemos hecho es repercutir los costes en el producto y, de momento, vendemos. Pero, esperemos que este recorrido no sea muy corto y ojalá podamos bajar algo los precios si se reducen los costes. Pero el asunto está complicado. De hecho, hay mercados de exportación que ya hemos perdido.

Nuestro gasto más relevante es el gas. Cocemos las tejas con este combustible

¿Cuáles?

Por ejemplo, América central. Ya eran mercados un poco deprimidos. Hablo de Guatemala, El Salvador, Puerto Rico o Costa Rica, en los que el precio del producto es un factor fundamental. Si no es competitivo, dejas de vender porque allí competimos con colombianos y brasileños, que no tienen los problemas que tenemos ahora. La gente está dispuesta a pagar un margen de diferencia, pero cuando es muy alto, no vendes. Donde sí seguimos vendiendo es en Estados Unidos. Allí el precio no es tan importante porque estamos en el nicho de mercado más alto, en el que por precios no dejan de comprar.

¿Qué porcentaje de vuestra facturación supone la exportación?

Ya representa el 50%, con lo cual es muy importante. Si nos falla la exportación, tendremos un problema.

¿El continente americano es un cliente más importante que Europa?

En Europa, solo vendemos en Portugal, pues hay cerámicas en Alemania, Francia, Italia... Tenemos nuestros mercados en Portugal, América central y Estados Unidos.

Cuando estás vendiendo un producto que el año pasado costaba la mitad, es complicado. Puede llegar un momento en el que no se consiga vender

¿Qué tipo de medidas reivindican desde el sector para capear la crisis?

Tenemos una asociación a nivel nacional que es bastante fuerte y lucha para que nos den ayudas. Las están otorgando en Italia, Francia y Alemania. Y a nosotros, de momento, nada de nada. Y no tengo muchas esperanzas. En Castellón, ya están parando factorías de azulejo y cada vez son más porque no se consigue pagar el gas. Pediría que el Estado nos echara una mano.

¿Están invirtiendo en solar fotovoltaica para reducir la factura?

Ese proyecto se paró por el covid y ahora lo hemos retomado. Está bastante avanzado y seguramente firmemos el contrato la próxima semana para poner 1 megavatio, lo que nos permitiría producir entre el 15 y el 20% de lo que consumimos. Si todo fuera bien, ya lo habríamos hecho. Pero el covid nos cogió poniendo en marcha la nueva línea de producción para teja plana. Así que decidimos seguir con lo que teníamos empezado y aparcar el resto.

Hay que confiar en que la crisis energética amaine...

Efectivamente. A pesar de todo, vamos bastante bien. No me quejo. Pero no sé el recorrido que esto tendrá porque cuando estás vendiendo un producto que el año pasado costaba la mitad de lo que cuesta ahora es complicado. Puede llegar un momento en el que no se consiga vender. Esperemos que todo se vaya normalizando.

Si un tejado está bien ejecutado, se ahorra hasta un 70% de energía. La arcilla es un aislante térmico; ahí está el botijo

¿La construcción sigue resistiendo?

Cuando hay incertidumbre, una persona que quiere renovar un tejado suele decidir aplazar la obra. Creo que se va a retraer la demanda. Ojalá me equivoque.

¿La rehabilitación de cubiertas entra en los programas de ayudas a la eficiencia energética financiados con fondos europeos?

Sí. Hay ayudas específicas para cubiertas. Pero las dotan de un presupuesto muy limitado que se agota en muy poco tiempo. Hay ayudas tanto para la teja como para la pizarra, pero con pocos recursos.

¿Cuánto gana una casa en términos de eficiencia con un buen tejado?

Si está bien ejecutado, si se hace con el Verea System, que tenemos homologado, se ahorrará entre un 60 y un 70% de energía. En verano se notará más frescor en la vivienda y en invierno, más calor, porque la arcilla es un aislante térmico, cosa que no sucede con la pizarra. Esta última ya se vende en mercados en los que el bajo techo no es habitable, sino que se utiliza como desván, lo que sucede en Alemania o Francia, donde los tejados tienen mucha pendiente. La pizarra acumula mucho calor en verano y frío en invierno. La arcilla es un aislante térmico, pensemos en el botijo, que mantiene el agua fresca.

¿La pizarra sigue siendo más cara que la teja pese al aumento de precios de esta última por la crisis?

Sí. El metro cuadrado es más caro y es normal. La teja es un producto industrial y la pizarra tiene más costes de producción. En la fábrica de teja curva, producimos 200.000 al día y es mucho en metros cuadrados de cubierta. Los metros que hacemos en un día a la pizarra pueden llevarle un mes. La pizarra que se vende aquí es un porcentaje pequeño, se exporta la inmensa mayoría. Es más para climas muy fríos, pues el tejado de pizarra evacúa muy bien la nieve al ser liso.

¿Habrá una quinta generación al frente de la empresa?

Espero que sí. [Se ríe] Tengo aquí a una hija y un hermano mío tiene a un hijo como director comercial.

Comentarios