La representación gallega en el ránking de las cien mayores fortunas de España que elabora la revista Forbes fue a menos en la edición 2021, aunque solo en número de representantes. Son seis, uno menos que en la edición de 2020, pero suman 78.400 millones de euros, un 20% más, lo que da una idea de la velocidad con la que están borrando la huella del covid. Son más de seis veces el presupuesto récord de 11.627 millones que en 2022 manejará la Xunta para financiar la sanidad, los servicios sociales y la educación. Tanto es así que estos seis exponentes del capital gallego acumulan hoy un 8% más de lo que tenían los seis integrantes de la lista Forbes 2019, cuando la idea de una pandemia global era pura ciencia ficción.
A la cabeza de esta fotografía de la riqueza —que toma como base el valor de las inversiones— figura, un año más, Amancio Ortega, el fundador de Inditex, que precisamente el martes completó el ingreso de los 1.293,6 millones de euros que en 2021 le tocaron en concepto de dividendo de la multinacional de Arteixo, de cuyo capital controla el 59,294%. Tras un 2020 nefasto para el textil por la caída del consumo y el cierre de tiendas debido al confinamiento, Inditex —que sostiene más de 144.000 empleos en el mundo— remontó el vuelo este año. Ortega, que reinvierte parte de los beneficios que recibe de Inditex en el ladrillo, con lo que el grupo Pontegadea es ya la mayor inmobiliaria de España, acumula un patrimonio valorado en 67.000 millones, un 17,5% más que en 2020 y un 6,3% por encima del nivel de 2019. Su fortuna equivale a la de los 49 que le siguen en la clasificación y justifica que Galicia siga siendo la comunidad líder del estudio.
En el segundo lugar tampoco hay cambios. Ahí sigue Sandra Ortega, la hija del multimillonario y de la difunta Rosalía Mera. Su patrimonio, que asciende a 6.300 millones, está controlado por Rosp Corunna, bajo cuyo paraguas se agrupan el 5,053% que ostenta en Inditex, el 5,010 de PharmaMar, o el 30,6% de la cadena hotelera Room Mate, en la que busca desinvertir tras diez años en pérdidas.
El tercer representante gallego es nuevo, aunque llega con fuerza pues se encarama al quinto puesto de los más acaudalados del Estado tras la saga Ortega; Rafael del Pino, presidente de Ferrovial, y Juan Roig, el fundador de Mercadona. Se trata del presidente de Abanca y primer accionista (84,75%), Juan Carlos Escotet. El patrimonio del banquero hispano-venezolano —de madre asturiana y padre leonés y afincado en A Coruña— se sitúa en 2.700 millones, según Forbes, que constata que Banesco, el grupo financiero internacional que preside, tiene presencia, además de en España, en Estados Unidos, Venezuela y Panamá.
En una edición que refleja que la fortuna de las cien familias más adineradas de España despuntó un 17%, hasta los 153.575 millones, los hermanos Felipa y Manuel Jove Santos, los herederos del fallecido magnate del ladrillo Manuel Jove, manejan cada uno 600 millones. Con ello, se sitúan en el puesto 48 con su holding Inveravante, cediendo seis posiciones.
El que también retrocede es el lucense Luis Fernández Somoza, el expropietario de Azkar, que pasa del 61 al 69. Y eso a pesar de que su patrimonio —en el que tuvo mucho que ver la venta en 2008 de la compañía de transportes al grupo alemán Dascher— ha crecido un 14%, hasta los 400 millones. Actualmente, gestiona sus activos a través de Calde y Ardizia de Inversiones, entre otras sociedades.
En un informe con solo 30 mujeres, repite Isabel Castelo D’Ortega, que vive a caballo entre Madrid y Oleiros. A la presidenta de Seguros Ocaso, Forbes le atribuye 400 millones, lo mismo que imputa a su hija, Isabel de Mandalúniz. Sin concretar el paquete de títulos que ostentan, la revista las sitúa como accionistas mayoritarias y apunta que "la información es escueta".
ADIÓS. Pese a que en la clasificación las renovables cobran peso, en el caso de Galicia deja el ránking Manuel García Pardo, el presidente de Greenalia, que en 2020 irrumpió en el puesto 96 con 225 millones. También se descuelga José María Fernández de Sousa, el presidente de PharmaMar, que llegó a ser el 91. La cotización de la biofarmacéutica —de cuyo capital controla el 11,1%— reculó un 19,5% desde enero ,hasta los 1.132 millones.
