La papelera Ence incrementó sus ganancias en el primer trimestre del año, anotándose un beneficio neto de 13,9 millones de euros. Esto es, un 43,9% más que los registrados en el mismo periodo del año anterior, cuando ganó 9,7 millones de euros.
La compañía de energía y celulosa, en el punto de mira por la polémica renovación de la concesión de su fábrica en Pontevedra, dio cuenta este miércoles de los resultados obtenidos en los tres primeros meses del ejercicio. Entre los datos más relevantes facilitados por la empresa en un comunicado, destaca que su cifra de negocio en ese periodo ascendió a 150,2 millones de euros, lo que suponen una mejora del 3,9% respecto al ejercicio precedente.
En la misma línea, el beneficio bruto de explotación (Ebitda) ajustado de la firma repuntó un 5,4% entre enero y marzo en comparación con el mismo trimestre de 2015, al alcanzar los 37 millones de euros. Eso sí, su deuda financiera neta también creció. En concreto, se situó en 241,9 millones, un 9,7% más que en los tres primeros meses del año pasado.
Ence cree que se utiliza la concesión en Pontevedra como "arma política contra el Gobierno en funciones"
La compañía ha resaltado en su escrito la "fortaleza" de la demanda de la celulosa de eucalipto, que creció un 8,5% en los dos primeros meses de 2016 (último dato disponible) frente al mismo periodo de 2015, un aumento "muy superior" al de la demanda global de celulosa, que fue del 4,8%.
Dentro del programa de desinversión de activos, en este periodo se firmaron contratos de arras para la venta de 1.305 hectáreas de fincas de regadío en el sur por un importe total de 29,9 millones de euros. Estas ventas, que la empresa prevé perfeccionar en el tercer trimestre, tendrán una plusvalía aproximada de 12 millones de euros.
En este escenario, el pasado 14 de abril se hizo efectivo el pago de un dividendo complementario de 0,1 euros brutos por acción correspondiente al ejercicio 2015, que sumado al abonado a cuenta el pasado octubre de 0,044 euros por título supone una rentabilidad del 4,7% sobre la cotización media de 2015.
CONCESIÓN DE PONTEVEDRA. Según ha indicado la compañía a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), la actual situación parlamentaria por la que atraviesa España está provocando una "desmedida politización" de la concesión de la fábrica de Ence en Pontevedra, que "algunos grupos políticos han convertido, sin que existan razones legales ni medioambientales, en arma política contra el Gobierno en funciones". De acuerdo con la compañía, la renovación del permiso ha seguido rigurosamente todos los trámites que marca la ley.
Al respecto, incide en que, "como cualquier acto de administración ordinaria", la concesión puede renovarse por un Gobierno en funciones. Así, "confía plenamente" en que los enfrentamientos políticos en torno a su fábrica de Pontevedra "no tendrán consecuencias sobre la concesión, que ha sido otorgada de acuerdo a derecho", y piensa que cuando el Parlamento elija al nuevo Ejecutivo "este debate se irá racionalizando".
