El Banco Espírito Santo (BES) anunció hoy unas pérdidas de 3.577 millones de euros en el primer semestre del año, las más abultadas de toda su historia, debido a su exposición a filiales del grupo al que pertenece en dificultades contables.
En un comunicado enviado a la Comisión del Mercado de Valores (CMVM) lusa, la entidad portuguesa informa de que los fuertes perjuicios se deben a "factores de naturaleza excepcional".
Según los analistas, estos resultados, que superan los peores pronósticos, podrían forzar un nuevo aumento de capital del BES debido a que el colchón financiero del banco es de unos 2.100 millones de euros, según datos divulgados este mismo mes por la propia entidad.