De la calle a los balcones y a internet: así será el Primero de Mayo en Galicia

UGT, CIG y CCOO, que ni siquiera esta vez, pese a las excepcionales circunstancias, hacen una convocatoria unitaria en Galicia, coinciden sin embargo en lo esencial.
Una manifestación. XESÚS PONTE
photo_camera Una manifestación. XESÚS PONTE

No será un Primero de Mayo más. El coronavirus obliga a trasladar las reivindicaciones de la clase trabajadora de la calle a balcones y ventanas, y también a las redes sociales y a internet, en una jornada que los principales sindicatos en Galicia consideran "con más razón de ser".

No solo cambian las formas, también el contexto y la amenaza de una crisis de consecuencias impredecibles e incalculables. UGT, CIG y CCOO, que ni siquiera esta vez, pese a las excepcionales circunstancias, hacen una convocatoria unitaria en Galicia, coinciden sin embargo en lo esencial.

Estas tres centrales reclaman un refuerzo de los servicios sociales, vista su importancia para hacer frente a la pandemia, y de la protección económica y social de los más desfavorecidos.

Será también una nueva ocasión para reconocer la labor de los trabajadores de los considerados servicios esenciales, "quienes nos cuidan, protegen y dan de comer", señala a Efe el secretario general de UGT en Galicia, José Antonio Gómez.

CCOO y UGT han convocado una manifestación virtual a las 12.30 horas y por la tarde ofrecerán una serie de conciertos en streaming; la CIG invita a engalanar ventanas y balcones con banderas rojas y de Galicia y cantar a mediodía la Internacional.

Ramón Sarmiento, secretario general de CCOO Galicia, admite a Efe el escenario "extremadamente complejo" que dibuja esta pandemia y delimita cuál debe ser la prioridad de la acción de Gobierno, patronal y sindicatos: una salida diferente a las de crisis anteriores y dar prioridad a los intereses de la clase trabajadora.

Abunda en este planteamiento Paulo Carril, secretario general de la CIG, quien previene de tentaciones, con el "pretexto" de una crisis sanitaria, de cometer "un saqueo a nuestros derechos condiciones de vida y de trabajo".

Carril hace una enmienda a la totalidad de las políticas laborales y económicas del Gobierno y de la Xunta, a su juicio "injustas e insuficientes" para afrontar la actual coyuntura, y apuesta por enterrar las "privatizaciones masivas", especialmente patentes en los ámbitos sanitario y sociosanitario.

José Antonio Gómez apunta que "si algo demostró esta pandemia es la necesidad de fortalecer los servicios públicos. Los recortes previos trajeron estas consecuencias de deterioro en servicios y en las condiciones laborales".

Apela el líder de UGT Galicia al empuje y a la iniciativa de "estados fuertes" que den prioridad a las políticas que "pongan en el centro a las personas".

UGT, CC.OO. y CIG también coinciden en saludar, incluso en urgir la aplicación de la renta mínima vital, y en clave gallega, en dar músculo al sector primario y corregir "debilidades del sistema productivo", como la deslocalización de determinadas producciones de material, por ejemplo, los equipos de protección individual.

Un material del que los trabajadores deben disponer para una vuelta a la actividad "segura", subraya Ramón Sarmiento, que habla de una "nueva cultura preventiva que llegó para quedarse".

El secretario general de CCOO reconoce que le habría gustado "más agilidad" en el abono de las prestaciones para los afectados por Erte, pero se acuerda de aquellos trabajadores que ni siquiera tuvieron ese "paraguas de protección", sino que "directamente fueron expulsados del mercado laboral".

Considera que el contexto económico global "va a condicionar mucho la recuperación" en España y en Galicia, más allá de aquellos aspectos que dependen directamente de la gestión de desescalada local y regional.

Y en clave regional, el líder de Comisiones Obreiras critica que las propuestas que los sindicatos le han trasladado a la Xunta desde el inicio de la pandemia han obtenido "una nula receptividad".

Dice sentir una "envidia sana" al ver que el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, "se reúne casi a diario, o cada semana, con agentes sociales y económicos", mientras que "en tres años con -Alberto Núñez- Feijóo solo tuvimos una reunión".

Al presidente gallego le sugiere que "aparte de tener la lengua tan larga" para criticar la gestión del Gobierno, "debería tener las orejas activas y ser receptivo a las propuestas de sindicatos y de la oposición".

Paulo Carril (CIG) sostiene que la gestión de la Xunta "ha multiplicado lo más perverso y negativo" de las decisiones que está tomando el Gobierno central, lo que, sumado a que la situación previa a la pandemia ya era "de emergencia industrial, demográfica y de desigualdad", agrava las consecuencias de esta crisis. Ataca a Feijóo por "aceptar la suspensión de competencias" con la declaración del estado de alarma y estar "satisfecho con eludir sus responsabilidades"

Y también le reprocha ir más allá de las "erráticas e injustas" decisiones del Gobierno, como por ejemplo en el retraso de la tramitación de los Erte o que haya fomentado "el caos y el abuso patronal" cuando se restringieron las actividades económicas a las imprescindibles. Cree Paulo Carril que en esta crisis sanitaria el presidente de la Xunta "ha estado más preocupado en el electoralismo que en resolver los problemas y amenazas que acechan al pueblo gallego".

José Antonio Gómez opina que "tiempo habrá para analizar la gestión de unos y otros, sus aciertos y errores", pero que "ahora es el momento de arrimar el hombro todos".

Abunda en que en el contexto actual "lo prioritario es proteger la salud de las personas y reactivar la economía", y para ello considera imprescindible llegar a consensos políticos, en los que participen todas las organizaciones políticas, empresariales y sindicales. "Meterse unos con otros no ayuda para nada. El conjunto de ciudadanía reclama consensos", concluye.

Comentarios