La Audiencia Nacional mantiene a la cúpula de Novacaixagalicia en semilibertad

La junta de tratamiento penitenciario propone el tercer grado para el abogado Ricardo Pradas ►La fiscala se opuso a dar un permiso a Pego al alegar que su arrepentimiento es "aparente"

Gorriarán, Gayoso, Pego y Rodríguez Estrada, durante el juicio en 2015. AEP
photo_camera Gorriarán, Gayoso, Pego y Rodríguez Estrada, durante el juicio en 2015. AEP

A falta de casi un año para que los exdirectivos de Novacaixagalicia encarcelados en enero de 2017 lleguen al término de su condena a dos años de prisión entre el 9 y el 15 de enero de 2019, la Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional ha rechazado los recursos con los que la Fiscalía pidió revocar la decisión del Juzgado Central de Vigilancia Penitenciaria de flexibilizarles el segundo grado de internamiento permitiéndoles realizar voluntariado fuera de los penales de A Lama y Soto del Real.

En un auto con fecha del pasado viernes, los jueces Nicolás Póveda, Ramón Sáez y Fermín Echarri confirman que el exdirector de la oficina de integración de la caja fusionada, Óscar Rodríguez Estrada, conservará la semilibertad a la que accedió en noviembre a cambio de colaborar con el Banco de Alimentos de Vigo. Se trata de una acción tendente a impulsar su reinserción y a "resarcir a la sociedad de la desconfianza generada" por el delito de administración desleal en el que incurrió junto al exdirector general de la caja fusionada, José Luis Pego, y el que fuera responsable del área inmobiliaria, Gregorio Gorriarán.

La fundación Érguete ha solicitado para Gayoso la libertad condicionada vista su avanzada edad y su estado de salud

Condenados por modificar sus contratos de alta dirección para preparar su salida con indemnizaciones millonarias —la Audiencia Nacional determinó que cobraron unos 10,44 millones de forma indebida—, los magistrados constatan ahora que Estrada, sin antecedentes por delitos anteriores, ha cumplido ya la mitad de la pena "con una buena conducta y correcta participación en actividades programadas", a lo que hay que sumar el hecho de que ha disfrutado de permisos sin incidencias, tiene familia y "hábitos laborales". Los jueces también argumentan su decisión de flexibilizar la ejecución de la pena —aunque descartan "la progresión a tercer grado"— en que el exdirectivo ha asumido su responsabilidad por el delito y satisfecho el dinero reclamado en concepto de responsabilidad civil.

La argumentación se repite en el caso del abogado laboralista Ricardo Pradas, condenado junto al excopresidente de la caja Julio Fernández Gayoso en calidad de cooperadores necesarios por amparar las maniobras de los tres exdirectivos. Pero hay un matiz, pues en lo que concierne al letrado —que colabora con la Hospitalidad de Nuestra Señora de Lourdes en Madrid— los jueces señalan que la junta de tratamiento ha propuesto la progresión al tercer grado, esto es, la libertad condicional al haber cubierto la mitad de la pena, aunque la Audiencia se opone a otorgar este beneficio, por el momento.

Los jueces de la Audiencia destacan la participación en la vida carcelaria de Pego, Pradas y Estrada y su buen comportamiento

ARREPENTIMIENTO. En cuanto a Pego, que colabora con el Banco de Alimentos de Vigo, los magistrados también han tumbado la apelación de la fiscala Pilar Melero contra la concesión de un permiso de salida de siete días a finales del año pasado, cuando accedió además a una flexibilización de su segundo grado. Mientras el ministerio público se opuso a la medida por el riesgo de "alarma social", argumentando que Pego, de 60 años, tiene otras causas pendientes con la Justicia, y que su arrepentimiento es "aparente", la Audiencia rechaza uno por uno todos los puntos y recalca que, además de devolver el dinero reclamado, el banquero vigués "manifestó públicamente" su arrepentimiento. Lo que cada uno piense en su fuero interno es otra cosa, pues, como resume el auto, "la conciencia es un ámbito reservado del condenado que el Estado no puede intentar modificar".

GAYOSO. En cuanto a Gayoso, que fue el primero en acceder a la semilibertad y colabora desde agosto con la fundación Érguete, centrada en la lucha contra la drogadicción y el auxilio a colectivos vulnerables, la organización que dirige Carmen Avendaño ha solicitado a Instituciones Penitenciarias la concesión de la libertad vigilada con el fin de que pueda permanecer en casa. En declaraciones a la Cadena Ser, Avendaño apuntó que el banquero vigués ayuda con la contabilidad y "las consultas a través de internet" y está "muy sorprendido" por la labor de la asociación. "Es una persona entrañable, está viendo una parte de la sociedad que desconocía y eso para una persona que siempre estuvo en un estamento muy elevado debe ser una experiencia", recalcó la activista antidroga.

Aquejado de una lesión en la columna, Avendaño explicó que los informes médicos avalan que "está mal y tiene que tener una vida mucho más tranquila". "No tiene edad para levantarse y estar a las nueve de la mañana".

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