Valores en el césped

Valores positivos y deportividad por encima de todo. En el prebenjamín b del Lugo los grandes gestos ganan siempre el partido para un grupo de niños nacidos en 2009, que prefirieron renunciar a la magia de marcar un gol para dar el mejor ejemplo en el Torneo de Illescas (Toledo). Un tanto que podría haberle valido jugar unos cuartos de final contra el Real Madrid.

El equipo dirigido por Hugo Vázquez salía por primera de la ciudad amurallada. Era una experiencia nueva en un trofeo prestigioso. En la fase preliminar quedó encuadrado en un grupo formado por cinco equipos de los cuales pasaban los dos mejores. El duelo inicial —cada partido duraba 12 minutos— lo perdió por 3-0 ante el Rayo Alcobendas. En el segundo, ante el Alcalá, corría el minuto cuatro cuando anotaron el primer tanto sin fijarse que había un niño del cuadro rival tendido en el suelo. Al darse cuenta del hecho, el técnico Hugo Vázquez y su cuerpo técnico decidió pedir al colegiado que anulase el gol y diese bote neutral. El colegiado accedió y el Lugo acabó ganando por un corto 2-1.

Sin embargo, el cuadro rojiblanco acabó igualado a siete puntos en la segunda plaza con el Adelot Toletum y fue el golaverage el que determinó el pase de los manchegos y la eliminación de los lucenses. El premio por pasar a cuartos de final habría sido un duelo por continuar vivos con el Real Madrid, un partido que todos los niños esperaban.

"Cuando vimos que el balón entraba y el niño del Alcalá estaba en el suelo decidimos pedirle al árbitro que anulara el gol y diera bote neutral", relata el técnico Hugo Vázquez.

"Era la primera vez que los niños se tenían que quedar a convivir fuera de Lugo. Si sales a un torneo fuera de nuestra ciudad siempre intentas dar buena imagen, aunque los resultados no son lo primero, sino que la prioridad para nosotros es la formación íntegra de todos los niños, su comportamiento, su actitud y los valores", valora Vázquez.

"Son niños de siete y ocho años que marcaron su primer gol en un torneo y lo celebraron, pero luego yo les expliqué por qué habíamos tomado la decisión. A alguno le costó un poco entenderlo, pero luego lo interiorizaron sin problema", confirmó el preparador.

Hugo Vázquez afirmó que el colegiado, los rivales y la organización los felicitaron por ese gesto. "El árbitro no puso ningún problema y él, como también los rivales, aplaudieron nuestro gesto. Tanto el colegiado como la organización al final del partido nos lo recordaron", manifestó el entrenador del conjunto rojiblanco. "Lo volveríamos a hacer en cualquier situación", recalcó Vázquez.