Vallejo ya asusta con el Lotus

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Los hermanos Sergio y Diego Vallejo volvieron a impartir una lección magistral de automovilismo al conseguir llevar a su Lotus Exige hasta la segunda posición en el Rallye de Cantabria, tercera prueba puntuable del campeonato de España, que se disputó bajo unas variables condiciones climatológicas.

La lluvia, la niebla y, sobre todo, el barro de los primeros tramos de la mañana supusieron que el rallye se iniciase con un resultado sorprendente en el primer tramo, cuyo scratch fue para Eugenio Mantecón (Mitsubishi Evo X) con Alberto Hevia (Skoda Fabia S2000) segundo. Entre los favoritos del campeonato, Sergio Vallejo (quinto) superaba a Xevi Pons (séptimo) y, sobre todo, a Miguel Fuster (décimo), que no se sintió cómodo en ningún momento sobre su habitual Porsche 911 GT.

En los tramos siguientes, tanto Alberto Hevia como Xevi Pons (Ford Fiesta S2000) impusieron un fuerte ritmo, beneficiados por la tracción integral de sus vehículos, mientras que Vallejo no podía evitar perder un valioso tiempo, sobre un asfalto muy resbaladizo, en el que poco podía hacer con su coche de tracción trasera.

Uno de los mayores perjudicados por estas difíciles condiciones fue Eugenio Mantecón, que en el segundo tramo sufrió una salida de carretera que le hizo perder varios minutos que ya después fue incapaz de recuperar.

Segunda sección

A medida que avanzó el día, la carretera se fue secando, aunque con no pocas zonas aún húmedas, lo que obligaba a los pilotos a ser cautos. Al primer tramo de la tarde, Alberto Hevia llegaba como líder de la carrera, con Xevi Pons en segunda posición y Sergio Vallejo ya instalado en el tercer puesto.

Sobre los tramos más largos de la jornada, el piloto de Meira fue el más rápido y recortó unos importantes segundos a sus rivales, aunque no los suficientes como para poder inquietarles en la clasificación general, que en ese momento ya estaba encabezada por Xevi Pons.
Aun así, estos primeros ‘scratchs’ del Lotus fueron acogidos por todo el equipo como una victoria, ya que evidenciaban que el esfuerzo realizado las semanas previas a la carrera para solucionar los problemas que habían detectado en el coche tanto en La Vila Joiosa como en Canarias había merecido la pena.

Los hermanos Vallejo se convirtieron en los grandes dominadores de los tramos de la tarde. De hecho, marcaron el mejor tiempo en tres de las cuatro especiales cronometradas. Además, en el penúltimo tramo del día, Alberto Hevia vio agravados los problemas mecánicos que arrastró durante toda la segunda sección y no pudo arrancar su vehículo, viéndose obligado a abandonar.

SERGIO VALLEJO
Cantabria es un rallye raro pero vamos por el buen camino

Sergio Vallejo no podía ocultar su felicidad tras la brillante segunda posición que consiguió en el rallye cántabro. El piloto lucense tuvo al final de la prueba palabras de elogio para todo el equipo «que trabajó sin descanso para que todo estuviese a punto».

Después de las carreras de Vila Joiosa y Canarias, el Lotus Exige de Sergio Vallejo fue profundamente revisado para localizar los problemas mecánicos que venía arrastrando. El coche llegó a Santander casi el mismo día de la carrera, por lo que Sergio Vallejo se subía a él con la incógnita de no saber cuál sería su rendimiento. Después de la carrera, el de Meira se mostró muy satisfecho con el coche, cuya evolución, ahora sí, parece ir por el buen camino.

De cualquier modo, el lucense prefiere ser cauto de cara a marcarse objetivos para las próximas citas del campeonato, que llegarán a tierras gallegas el próximo mes de junio.
«Cantabria fue un rallye muy extraño que se disputó en unas condiciones muy difíciles. Estamos muy contentos con el puesto conseguido y esperamos que lo podamos repetir, aunque, de momento, cómo se comportará el Lotus en tramos con más calor y con un asfalto más abrasivo es todavía una incógnita», señaló Vallejo. «En cualquier caso, creo que visto el rendimiento que ha tenido hoy el coche, vamos por el buen camino», reconoció el de Meira.

Otros lucenses

El rallye de Cantabria también contó con la participación de otros dos lucenses. Adrián Díaz finalizó octavo de la general, aunque lejos de su compañero de equipo, Enrique García-Ojeda, que fue cuarto con un coche similar. Por su parte, Juan Dorribo, también con un Ford Fiesta R2, abandonó por una salida de carretera.

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