Reacciones de todo tipo ha generado la decisión de la Liga de Fútbol Profesional de suspender el comienzo de la temporada en Segunda División, mientras no se resuelve el conflicto por la obligación, impuesta por un juez, de readmitir al Murcia. Las declaraciones van desde el "suena a chiste" de un jugador del Alavés hasta lo de "un jaleo así es malo para todos", como dicen en el Lugo.
A la espera de la reunión convocada para el lunes por la LFP, este viernes, el jugador del Alavés Raúl García dijo que "suena a chiste" la suspensión de la primera jornada de la Liga Adelante 2014-15. "Suena a chiste esto que está pasando en una Liga como la española que presume de ser la mejor", reflexionó el lateral zurdo este viernes ante los medios tras concluir la sesión preparatoria en Ibaia.
También este viernes, el segundo entrenador de Osasuna, Kibu Vicuña, reconoció que la suspensión les afecta porque estaban preparados para comenzar la competición el próximo fin de semana, pero ha dicho que intentarán que esa decisión les perjudique "lo menos posible". "Estábamos preparados para comenzar la competición el fin de semana que viene", manifestó al respecto.
El mismo jueves, el presidente del Real Valladolid, Carlos Suárez, opinó que la LFP tomó la decisión para evitar "perjuicios mayores" en el futuro. A su juicio, se trata de una situación "complicada" porque afecta a equipos y a aficionados.
Otros han visto otros aspectos positivos, como el presidente del Mirandés, Alfredo de Miguel, que el jueves, en declaraciones a la Radio Galega, reconoció que este retardo, de al menos diez días, le vendrá bien al cuadro burgalés para hacer las obras de adaptación en su campo. Las obras tienen carácter de urgencia, porque el Mirandés no supo hasta comienzos de mes que era el que iba a sustituir al Murcia en la división de plata del fútbol español. En esa primera jornada estaba anunciado un Murcia-Lugo, que después, cuando la LFP dictaminó el descenso de los murcianos, se convirtió en un Mirandés-Lugo.
DESDE LUGO
Desde la entidad lucense, Carlos Mouriz, director deportivo, mostró su descontento con la situación que se vive estos días en la Segunda División. "Un jaleo como éste es malo para todos los equipos, y malo para el fútbol", señala en unas declaraciones recogidas este viernes en la edición impresa de El Progreso.
Este viernes, Jonathan Valle, centrocampista ofensivo del Lugo, afirmó que el retraso del inicio de la Liga Adelante "trastoca" los planes de trabajo de los equipos. "Trastoca todos los planes de trabajo, pero es lo que hay y tenemos que seguir trabajando, poniéndonos a punto y que lo arregle el que tiene que arreglarlo", indicó en conferencia de prensa.
Eso sí, el jugador del conjunto gallego aclaró que "no hay mal que por bien no venga" y explicó que el Lugo intentará "sacar lo positivo" de este retraso.
EL MURCIA ACUDE AL FISCAL
Y en este viernes festivo, el causante del conflicto, el Real Murcia, acusó a la LFP de "seguir burlando" el cumplimiento de la orden judicial de inscribir al conjunto grana en la Liga Adelante y pide que se le aperciba por incurrir en desobediencia, así como que intervenga el Ministerio Fiscal para que se le impongan responsabilidades penales.
En otra nota, la entidad murcianista calificó de "improcedente" y "nula de derecho" la actuación del Tribunal Administrativo del Deporte (TAD), que el jueves apuntó, alegando una cuestión de forma, a que el club grana no debería ser admitido en la Liga Adelante.
El Murcia señala que debe prevalecer la decisión adoptada por el juzgado de lo mercantil número 7 de Madrid, que sentenció el día anterior que la Liga de Fútbol Profesional (LFP) debe inscribir al equipo en la competición a pesar de sus deudas.
La resolución del TAD, añade, "solo pretende confundir y distraer la verdadera situación respecto de la inscripción y participación del club en la Segunda División A".
